Los socialistas dan portazo a Piqué y retiran su apoyo a la nueva Comisión de la Energía

El enfrentamiento entre el ministro de industria, Josep Piqué, y la oposición socialista aumenta de intensidad. El PSOE abandonó ayer la sesión de la Comisión de Industria del Congreso de los Diputados como rechazo a los nombramientos propuestos por Piqué la Comisión de la Energía, que presidirá el ex directivo de Endesa Pedro Meroño. Según el Grupo Socialista, el ministro ha formado esa comisión de forma unilateral sin contar con las personas que proponía. Sólo CiU y PNV, que manienen sus representantes, apoyaron a Piqué.

El portazo del grupo socialista tuvo lugar después de que su portavoz en la Comisión de Industria, Juan Pedro Hernández Moltó, acusara a Piqué de "provocador" y de "vengarse de un grupo [el socialista] que no se ha sometido a sus componendas", en referencia a las acusaciones lanzadas por el comportamiento fiscal de Piqué y las presuntas irregularidades cometidas en la concesión de ayudas desde su departamento. Moltó también subrayó que hacía un flaco favor a su Gobierno y tras resaltar que era un desprecio al Parlamento y lanzar "con su pan se lo coma" encabezó el abandono de la sala.

El ministro, que compareció a petición propia, se defendió de las andanadas socialistas en una sesión en la que estuvieron ausentes los representantes de IU, Coalición Canaria y el Grupo Mixto. Piqué aseguró que el nombramiento de los vocales y del presidente de la Comisión de la Energía (Meroño sustituirá también al dimitido presidente de la Comisión Nacional del Sistema Eléctrico, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, hasta que expire el mandato de dicha comisión, en el año 2000) es una responsabilidad absoluta y total del Gobierno, aunque se ha intentado un respaldo del resto de los grupos, sin que ello quiera decir un consenso en los nombramientos.

Piqué destacó que los nombrados forman un equipo de profesionales capacitados e independientes que vigilarán por el beneficio de los consumidores. Los nueve propuestos, que deben recibir la bendición del Consejo de Ministros, están encabezados por Pedro María Meroño, ex directivo de Endesa y consejero de Red Eléctrica y Enher, entre otras empresas. Como vocales, Piqué ha elegido a José Sierra (director en la Dirección General de la Energía de la Comisión Europea); Vicente López-Ibor vinculado a la asociación patronal eléctrica Unesa; Carlos Duato (directivo de Dolphin España); Femando Martí (directivo de Repsol); María del Carmen Fernández (inspectora de Hacienda); Jordi Dolader (ex directivo de Endesa y funcionario de la Comisión Eléctrica); Sebastiá Ruscalleda, y Juan Ignacio Unda Urzaiz. Estos dos últimos son actualmente vocales de la Comisión Eléctrica en representación de CiU y del PNV. Ambos se integrarán en la nueva Comisión de la Energía.

Conocidos los nombramientos, Hernández Moltó espetó Piqué: "Usted no es de fiar. Usted trae una propuesta que rompe acuerdos y usted no quiere una comisión independiente. Usted no soportaba a Miguel Ángel Fernández Ordóñez y ha diseñado una comisión domesticada". El PSOE defendía los nombres de Miguel Ángel Lasheras, José Alberto Zaragoza, Alberto Carvajo y el propio Fernández Ordóñez. Incluso acusó a Piqué de "volcar sus problemas psicológicos y su pasado dudoso en estos nombramientos".

Ignasi Guardans, por CiU, criticó la salida de Fernández Ordóñez "por ser muy poco elegante", y dijo que merecía otro trato y llamó la atención sobre el reglamento interno de la nueva Comisión. Joxe Joan González de Txabarri, del PNV, señaló que le gustaría que no arrancara con este enfrentamiento aunque, vio correcta la propuesta de Piqué.