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GUERRA EN YUGOSLAVIA Los bombardeos

Un ataque sobre Pristina destruye parte del centro de la ciudad y deja nueve muertos civiles

Tras 15 días de bombardeos, la OTAN no disminuye la intensidad de los ataques sobre Yugoslavia. Los misiles cayeron ayer sobre Montenegro, tras varios días de calma, y alcanzaron con especial violencia a la capital kosovar, Pristina, donde, según fuentes serbias, murieron al menos nueve civiles. La OTAN aseguró haber atacado por primera vez un objetivo móvil, una unidad de blindados. Al mismo tiempo, Belgrado emite mensajes conciliadores: tras el anuncio de tregua, insinúa la posibilidad de sacar sus tropas de Kosovo si la OTAN sale de Macedonia y la posible liberación hoy de los tres soldados estadounidenses.

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Ocupación y protectorado

Anoche los aviones de la OTAN volvieron a bombardear Belgrado. Sobre las 23.30, un avión aliado voló a baja altura sobre la ciudad y se escucharon tres fuertes detonaciones en el centro. Según la Defensa Civil los misiles habrían alcanzado varias sedes oficiales en la misma calle donde se encuentra el Estado Mayor. Además, la CNN informó esta madrugada de que un avión invisible Hunter estadounidense, sin piloto, se estrelló ayer en Yugoslavia, aunque el Pentágono no confirmó la información y no se sabe si fue abatido.Pero los mayores daños registrados en las últimas horas se produjeron entre la medianoche y las 4.00 de la madrugada de ayer, cuando Pristina sufrió, según el Estado Mayor del Ejército, "el ataque más brutal". Al menos seis proyectiles cayeron en la ciudad, algunos de ellos en el centro. Durante la tarde de ayer, los equipos de rescate aseguraron haber recuperado nueve cadáveres de entre los escombros de varias casas, y esperaban encontrar al menos otros seis cuerpos, entre ellos los de tres niños.

El ataque, además, destruyó la oficina de correos central "así como numerosos edificios de viviendas en su alrededor", según el Ejército. En las céntricas calles de Kosovskova y de Rey Milutin, la calzada y las aceras estaban cubiertas de ladrillos y escombros de los edificios alcanzados, entre ellos el del Banco Nacional, una farmacia y un centro de salud. Las autoridades regionales explicaron que "más de un centenar" de casas y locales resultaron destruidos en el centro mismo de la ciudad. En un segundo ataque, la OTAN alcanzó Gracanica y Ajvalija, los suburbios de la capital de Kosovo.

Objetivo: Novi Sad

Además de Pristina, las bombas se concentraron por sexto día en la capital de Voivodina, Novi Sad, donde una vez más la refinería se convirtió en el objetivo de los ataques. Por cuarta vez, las bombas alcanzaron en Cacak la fábrica Sloboda (Libertad) que, según las autoridades serbias, sólo produce electrodomésticos y cuya destrucción deja sin trabajo a 5.000 personas. Tras varios días sin padecer ataques, la segunda república de Yugoslavia, Montenegro se convirtió en objetivo de la OTAN. La capital, Podgorica, y sus alrededores sufrieron ataques y también el aeropuerto de Golubovci. La televisión oficial serbia (RTS) mostró los restos de un misil lanzado sobre Podgorica.Las bombas, sin embargo, no han frenado el movimiento civil de Belgrado. Ayer, por segundo día consecutivo y sobre las 20.00 horas, cientos de personas se lanzaron hacia el puente Brankov, sobre el río Sava, se agarraron de las manos y formaron una cadena de escudos humanos, en un gesto de desafío a las bombas de la OTAN. Un concierto de rock, y varios discursos animaron a los ciudadanos a pesar de que desde las 18.00 horas estaban sonando las señales de alarma. La convocatoria de ayer confirmó el éxito de la iniciativa que el martes pusieron en marcha varios profesores y estudiantes de la universidad de Belgrado.

A esta iniciativa civil se une el giro en la política informativa del régimen de Slobodan Milosevic, consciente de poder mostrar los efectos de los bombardeos sobre la población civil: los militares hablan ya de víctimas civiles, que en un primer momento se habían guardado como un gran secreto, y dan ahora facilidades a la prensa para visitar las zonas bombardeadas.

Al mismo tiempo que la OTAN no baja la presión, e incluso incrementa la intensidad de los bombardeos, el régimen de Belgrado no cesa de emitir mensajes con contenido conciliador: se espera que hoy, tras la mediación hecha por Chipre en los últimos días, el presidente del Parlamento grecochipriota, Spiros Kiprianu, recoja en Belgrado a los tres soldados norteamericanos capturados por el Ejército yugoslavo el pasado jueves.

Nueva propuesta

Ayer, el presidente de Yugoslavia, Slobodan Milosevic, transmitió una nueva oferta de paz a la OTAN a través de los parlamentarios rusos que lo visitaron. Según el diputado comunista Nikolai Rizhkov, Milosevic estaría dispuesto a retirar sus tropas de Kosovo si la OTAN repliega a las suyas de Macedonia (12.000 hombres) y no refuerza su presencia en Albania. Iniciativa explicada por Milosevic de este modo: "El primer objetivo es defender el país, pero esto no impide seguir en la búsqueda de una solución pacífica". El primer mensaje del presidente yugoslavo fue, sin embargo, la oferta pascual de alto el fuego, que no tuvo una respuesta positiva de la OTAN.El cuerpo de Ejército con base en Pristina comunicó ayer que todas las unidades habían observado la orden de cese el fuego unilateral acordado por el Gobierno de Yugoslavia y de Serbia. Sin embargo, ayer se pudieron ver desde la frontera albanesa varias aldeas kosovares en llamas. Ayer, la OTAN aseguró haber alcanzado el martes a una unidad de 12 blindados serbios que se desplazaba de Decani a Djakovica, en el suroeste de Kosovo. Sería el primer ataque a un objetivo móvil desde que se iniciara la operación el 24 de marzo.

En un análisis del enfrentamiento entre la OTAN y Milosevic, bajo el título Deseos y planes, el boletín V.I.P. de Belgrado, llega a la conclusión de que "Milosevic cree que cuanto más duren los ataques, más fácil le resultará erradicar al Ejército de Liberación de Kosovo, y los europeos incrementarán su presión sobre Estados Unidos para parar los bombardeos".

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