El PNV afirma que la violencia deslegitima al nacionalismo

El Partido Nacionalista Vasco (PNV) condenó ayer la oleada de acciones violentas que se registró el pasado fin de semana en el País Vasco contra los partidos políticos no nacionalistas, y advirtió a Euskal Herritarrok de que este tipo de ataques pueden volverse en contra suya y del nacionalismo. Desde el pasado viernes ediles del PP y del PSE-EE han padecido el azote de los violentos con sabotajes, envío de libros bomba o la colocación de artefactos en sus propiedades o viviendas de sus familiares.El portavoz del PNV en Vizcaya, Iñigo Urkullu, afirmó que la persistencia de la violencia "disfrazada de reivindicación nacionalista deslegitima al proyecto que desde los partidos nacionalistas" se está "impulsando". Pero al tiempo que denunciaba los sabotajes, Urkullu criticaba el "inmovilismo y la cerrazón injustificada" que el Gobierno central ha demostrado tras el alto el fuego de ETA.

Dirigentes del PNV y EA creen que la persistencia de la violencia callejera dificulta la anunciada colaboración parlamentaria de EH con el Gobierno vasco, que preside el peneuvista Juan José Ibarretxe. Representantes de las dos primeras formaciones se reunieron ayer en el seminario de Arantzazu (Guipúzcoa) con los dirigentes de HB que han iniciado una semana de ayuno para protestar por las recientes detenciones de etarras en Francia y España. Los asistentes a la reunión, entre los que figuraba el portavoz del PNV, Joseba Egibar, llegaron a un acuerdo sobre el diagnóstico de la situación creada tras las últimas detenciones, aunque no concertaron ninguna actuación conjunta.

Compromiso de EH

El portavoz de EH, Arnaldo Otegi, aseguró que hay un compromiso de su formación para acabar con las expresiones de violencia, aunque no precisó mayores detalles. No obstante, en línea con las palabras de Urkullu, aseguró que el fin de esta violencia está condicionado a un esfuerzo bilateral, y apuntó que "ni los Estados español y francés están por la labor". Joseba Egibar añadió que los actos de violencia callejera que se han registrando en las últimas fechas "perturban el ambiente y no facilitan que se consoliden con más fuerza espacios de colaboración", y advirtió de que ese tipo de acciones tienen que desaparecer ya que su partido, el PNV, "no necesita la compañía de ninguna acción vulneradora de derechos".

En el mismo sentido se expresó el portavoz de Eusko Alkartasuna, Rafael Larreina, quien solicitó "esfuerzos para que la violencia en cualquiera de sus manifestaciones desaparezca y la palabra sustituya a la fuerza".