Viena rinde homenaje al Borges filósofo

La Biblioteca Nacional de Viena debate la filosofía del escritor Jorge Luis Borges en un simposio de intelectuales europeos y lationamericanos que se inaugura hoy. También María Kodama, viuda del escritor argentino, participa en el debate sobre el alcance de Borges como un agnóstico precursor del postmodernismo que en sus Laberintos simbolizaba la imposibilidad del conocimiento, rescatando así la cuestión fundamental del pensamiento."Borges fue la fuente de inspiración de Las palabras y las cosas, de Michel Foucault, pero únicamente se le da importancia en el horizonte de la literatura, porque hoy en día los filósofos europeos tienen prejuicios contra la filosofía que no se plantea en estilo de tratado científico y ensayo", dijo David García, que abre el simposio, el cual ha sido organizado por el Instituto Austriaco para América Latina. El encuentro, organizado en la Biblioteca Nacional de Viena, promete ser polémico. Están quienes, como Rubén Sierra Mejía, de la Universidad Nacional de Colombia, consideran que para el autor de El Alef la filosofía era un mero instrumento de juego, mientras que otros ponen de relieve la trascendencia del Borges pensador, como Juan Arana, catedrático de la Universidad de Sevilla, que hablará sobre El antihumanismo de un humanista, Borges y la superación del modelo antropológico moderno.

Agnóstico

Borges se reconocía a sí mismo como agnóstico, pero, según David García, este hecho no ha merecido hasta ahora la atención que debiera en la amplia bibliografía sobre el escritor. "Es un pensador que pone en entredicho nuestro sistema de clasificaciones, de Hegel y Kant dice que eran los más grandes escritores fantásticos. Su actitud irreverente ante todos los mitos choca contra la prepotencia de las ciencias", explica el organizador del simposio."Para Jorge Luis Borges, la condición del hombre es el asombro, niega que pueda haber una salida del laberinto de la perplejidad a través del saber, niega la posibilidad del conocimiento de las grandes incógnitas como el tiempo, nuestros orígenes, etcétera", afirma, y señala la relación de Borges con el planteamiento de Aristóteles sobre la curiosidad del saber, y con el estilo de Platón de expresar filosofía en relato literario.

Michael Rössner, de la Universidad de Munich, planteará en el simposio la obra fantástica del autor argentino como subversión estética de la filosofía. Otras interpretaciones estarán a cargo del escritor costarricense Rafael Ángel Herra, la filósofa argentina María Gabriela Rebok y los expertos en literatura Karl Kohut, de Alemania, y Francisco Ferrero, de España.