El dolor de Cavalese
El presidente de la Junta provincial de Trento, a la que pertenece la localidad de Cavalese, donde se produjo la tragedia del Cermis, envió ayer una carta al primer ministro italiano, Massimo d"Alema, pidiéndole que el Ejecutivo "tome las iniciativas necesarias para que se averigüen las responsabilidades penales de quien ha causado el trágico suceso del Cermis". El presidente provincial, Lorenzo Dellai, transmite en dicha carta dirigida a D"Alema el "dolor y la consternación" de los habitantes de la zona.En Cavalese, ayer, la Junta municipal tenía previsto reunirse para reclamar mayores restricciones a los vuelos de prácticas de los aviones militares de la vecina base estadounidense de Aviano, de donde despegó el avión que provocó la tragedia. El mapa de vuelo de la aeronave militar que seccionó los cables del teleférico que llevaba al monte Cermis, no tenía señalada siquiera la existencia de éste. En la catástrofe, sólo se salvó el conductor de la cabina que viajaba vacía y en sentido contrario a la cargada de turistas que se precipitó al fondo del valle, causando la muerte de 20 personas (tres italianos, siete alemanes, dos polacos, cinco belgas, dos austríacos y un holandés).
La investigación inicial de los fiscales italianos reveló algunas irregularidades en el comportamiento del capitán Richard Ashby, piloto del avión, quien fue acusado de haber manipulado la grabación de las imágenes tomadas desde el avión. Durante el posterior juicio militar, en febrero pasado, Ashby reconoció haber manipulado el altímetro del aparato para evitar que sonara la alarma al volar a baja cota. Los magistrados italianos que intervinieron en la investigación iniciada en Italia se mostraron ayer escasamente sorprendidos de la sentencia del tribunal militar de Camp Lejeune (Carolina del Norte). A su juicio, la absolución de Ashby era previsible, una vez que el tribunal ya había excluído la corresponsabilidad en la tragedia de las altas instancias militares norteamericanas e italianas de la base de Aviano.
