_
_
_
_

El CSIC mantiene que el 60% de los suelos tienen niveles altos de zinc y arsénico

Alejandro Bolaños

El presidente del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, César Nombela, mantuvo ayer que "no hay contradicción" entre los informes de este organismo y los publicados por el Ministerio de Agricultura, que avalaban que la mayor parte de las fincas agrarias del valle del Guadiamar eran aptas para el cultivo. "Sólo hay disparidad con los valores del zinc, lo que puede explicarse porque nuestros análisis se realizaron una vez retirados los lodos tóxicos".Aún así, el presidente del CSIC no quisó quitar hierro a la contaminación que aún queda en el valle del Guadiamar. Según sus datos, un 60% de los terrenos registraría niveles elevados de zinc y arsénico, y en el 20% de los casos, esta concentración estaría por encima de los límites legales. El informe del Instituto de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria (Inia), dependiente del Ministerio de Agricultura, aseguraba que el 84% de las fincas estudiadas tenían un nivel de acidez compatible con su puesta en cultivo y que en el 88% de los casos no había encontrado "valores superiores a los que marca la legislación de la Junta" de plomo, zinc y cobre, los metales pesados analizados (no así el arsénico) en muestras recogidas por la asociación agraria Asaja.

Nombela no quiso pronunciarse sobre si un estudio sobre tres elementos (el CSIC analiza siete) permitía concluir que los terrenos son cultivables. "Es difícil hacer una consideración global", indicó el presidente del CSIC, quien remarcó que la presencia de arsénico en concentraciones muy elevadas en algunos puntos justificaba la aplicación de remedios biogenéticos.

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_