El Gobierno alemán renuncia a prohibir el reprocesamiento del combustible nuclear
Las presiones de la industria nuclear alemana han descafeinado el borrador de proyecto de ley que prepara el ministro del Medio Ambiente de Alemania, Jürgen Trittin, para abandonar la energía atómica en un tiempo aún indefinido. El proyecto no ha perdido su intención de terminar con la energía nuclear pero ha renunciado a prohibir explícitamente el reprocesamiento del combustible nuclear ya utilizado.Michael Schroeren, un portavoz del Ministerio de Medio Ambiente, admitió ayer que la prohibición había sido "puesta entre paréntesis", como "lógica consecuencia" de las conversaciones que celebraron los empresarios de la industria nuclear y el Gobierno federal el 25 de enero pasado.
Trittin había querido prohibir el reprocesamiento del combustible nuclear en Francia y el Reino Unido a partir del 1 de enero del año 2000. Sin embargo, tuvo que dar marcha atrás ante las amenazas de pleitos internacionales por incumplimiento de los contratos que vinculan las centrales nucleares alemanas con instalaciones de reprocesamiento en los países vecinos. Schröder exigió entonces una reelaboración de la ley, que había preparado su ministro. Las relaciones entre ambos políticos se caracterizan por una gran tirantez.
Tanto el plazo para el abandono de la energía nuclear, que es parte esencial del programa y de las señas de identidad de los Verdes, como el calendario para poner fin al reprocesamiento del combustible utilizado están vinculados entre sí y deben decidirse en consenso con los empresarios energéticos. La próxima ronda de conversaciones está prevista para el 9 de marzo. Antes, el 3 de ese mes, el Gobierno examinará el proyecto de ley que prepara Trittin.
El borrador, que está siendo elaborado en el Ministerio del Medio Ambiente, conserva su orientación básica, según manifestó Schröder a este periódico. Entre los puntos recogidos está:
La prohibición de construir nuevas centrales atómicas.
- Se deja de "fomentar" la energía nuclear tal como prevé la ley de energía atómica actual.
- El aumento de la cuantía de los seguros para casos de accidente.
- La obligación de las centrales nucleares de construir sus propios depósitos de almacenamiento lo más cerca posible de la zona de operaciones, con el fin de evitar al máximo nuevos transportes.
- La reducción de los transportes de residuos radioactivos al mínimo razonable.
De la fecha de abandono de la energía nuclear dependerán las necesidades de combustible y, por tanto, las necesidades de reciclado.
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