_
_
_
_

Aumenta el uso del metro en Barcelona y desciende el de los autobuses urbanos

El número de pasajeros que utilizaron el metro y el autobús urbano en Barcelona aumentó el año pasado en más de 14,5 millones respecto a 1997 y se alcanzó la cifra de 481,2 millones de viajeros, según ha hecho público la empresa Transportes de Barcelona (TMB). El aumento se produjo sobre todo en el metro, que pasó de 259,9 a 280,8 millones de viajeros, mientras que el número de usuarios del autobús descendió de 207 millones en 1997 a 200 millones el año pasado. El ferrocarril metropolitano, cuyo número de usuarios descendió en 1997 a causa de los conflictos laborales, no sólo ha recuperado los viajeros perdidos, sino que ha incrementado la cifra en más de cuatro millones respecto a 1996. El aumento más espectacular se produjo en la línea 2 del metro, cuya ampliación ha supuesto una subida de más de un 50% en su utilización. Sin embargo, la línea que más pasaje ha transportado ha sido la 1, que fue utilizada por 82 millones de viajeros en 1998. El uso del autobús, por el contrario, ha descendido en un 3,4%. Los responsables de TMB lo atribuyen a las obras urbanas emprendidas en la ciudad y a las consecuencias que esto ha tenido en el tráfico. En este sentido, estas mismas fuentes señalan que el transporte público de Barcelona está viviendo una situación similar a la de 1991, año en el que coincidió una considerable cantidad de obras públicas con motivo de los Juegos Olímpicos. Baja el tráfico de mercancías Por otra parte, el aeropuerto de El Prat superó por primera vez la cifra de 16 millones de pasajeros en 1998, lo que representa un crecimiento del 7,51% respecto al año anterior, informa Manel Torres. Este aumento no se vio acompañado de buenos resultados en el tráfico de mercancías, ya que la carga aérea experimentó un descenso del 1,13%. Del total de pasajeros, más de la mitad (el 53%) tomaron vuelos nacionales. Sin embargo, la variación más importante se produjo en los vuelos hacia el extranjero. Así, el número de pasajeros que viajaron de España al resto de los países de la Unión Europea o viceversa creció un 11,68%, y el del resto de los vuelos internacionales un 11,5%. El movimiento de aeronaves, entre aterrizajes y despegues, registró un aumento del 3,12%. La dirección del aeropuerto considera que esta cifra demuestra que se pueden aceptar más salidas y llegadas, fuera de las tres franjas horarias en que las pistas trabajan al máximo de su capacidad. En cambio, la carga aérea, que superó por muy poco las 80.000 toneladas, sufrió un estancamiento, ya que se manipularon 912 toneladas menos que el año anterior. El leve descenso registrado se debió básicamente al mal resultado del tráfico nacional y del internacional. La Generalitat y el Ayuntamiento de Barcelona ya alertaron de esta situación el pasado mes de noviembre y achacaron la pérdida de carga a Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA), la empresa dependiente del Ministerio de Fomento que gestiona los aeropuertos.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_