El regidor pasa como protocolo 400.000 pesetas en alimentos

Con cargo al protocolo del alcalde, el Ayuntamiento de León ha abonado 396.777 pesetas en supermercados y tiendas de alimentación de la ciudad. En ese conglomerado hay de todo, aunque 92.345 pesetas se atribuyen a nueve facturas de unos conocidos grandes almacenes sin especificar los productos adquiridos.Las atenciones protocolarias que dispensa el alcalde a sus visitas suponen una inversión de casi 130.000 pesetas en bombones, pastas y caramelos, más de 55.000 en puros Montecristo número 4; unas 27.000 en café y 11.000 en leche evaporada. Lo del café en la alcaldía de León debe ser algo imprescindible porque la cafetera no ha podido con el ritmo de trabajo que le imprimen. Entre mayo y octubre de 1997 tuvo que ser enviada a reparar tres veces y su arreglo costó más que una nueva: 26.146 pesetas.

Todos esos gastos de mantenimiento figuran en el presupuesto normal del alcalde. Así como las 3.345 pesetas de espuma Estudio Line, consignadas el 7 de enero de 1998, que el gabinete del alcalde explica para fijar las barbas de los Reyes Magos aunque la cabalgata se hubiera producido dos días antes. O las 3.185 pesetas para vaselina, que esos portavoces argumentan en razones de urgencia para limpiar el nuevo sillón del despacho del alcalde tras cambiar la sede oficial del consistorio. También las esponjas y cremas para calzado, que alcalde y sus concejales dicen que usan para limpiarse cuando regresan de inaugurar una obra.

Y así, con esa respuesta de los motivos de urgencia que no se saben en qué parte del presupuesto apuntar, el alcalde valida facturas para pañuelos, perchas especiales para trajes, insecticidas, agua de Vichy, cava Codorniu, un sacacorchos, aceitunas, fármacos, flores, una minicadena Sony (34.900), un kit de manos libres para hablar por teléfono (24.500), llaves, cirios, manillas de puertas, dos hachas, ceniceros, pilas, silicona...