El plan andaluz de FP prevé 700.000 millones de inversión en ocho años

Andalucía invertirá desde ahora hasta el año 2006 más de 700.000 millones de pesetas en el plan de Formación Profesional (FP), un proyecto consensuado entre la Junta, los sindicatos y los empresarios, que prevé un único sistema que agrupe las tres clases de FP, la reglada, la ocupacional y la continua. La Formación Profesional reglada es la que se imparte en los centros docentes y a ella se destinará un presupuesto total de 422.000 millones de pesetas. La FP ocupacional, a la que se destinarán 218.000 millones, está dirigida a los desempleados y la continua, orientada al reciclaje de los profesionales en activo, contará con 88.000 millones para su desarrollo. Pero las tres modalidades de FP tienen un objetivo común: la lucha contra el paro. Por un lado formando profesionales que se adapten a las necesidades del mercado laboral para lo que se creará una agencia de cualificación profesional desde la que se tratará de determinar qué trabajadores reclama el sistema productivo andaluz. "No queremos que nos pase lo que ocurrió en Cádiz hace unos años, que se necesitaban soldadores y no se enseñaba el oficio". Durante 1999 se diseñará el Mapa de Recursos de la FP, que dibujará las necesidades formativas en función de la demanda laboral. Por otro lado, facilitará el reciclaje de los profesionales para que conserven sus puestos de trabajo, sujetos a las variaciones de las nuevas tecnologías. Y en tercer lugar, se dará la formación necesaria para que los parados puedan acceder a un futuro empleo. El plan andaluz prevé que las tres enseñanzas se impartan en centros específicos distribuidos por cada provincia para rentabilizar infraestructuras, equipamiento y profesorado. Una comisión se encargará anualmente de vigilar el buen desarrollo del plan, en el que han participado técnicos de todas las consejerías. Política de empleo Tanto los responsables de la patronal como los de los sindicatos coincidieron ayer en que este plan de FP está diseñado para que se convierta en la política activa de empleo más importante de la comunidad. "Es la primera apuesta seria por conectar las necesidades reales de trabajo con la formación de los profesionales", dijo Manuel Pastrana, secretario general de la UGT en Andalucía. Desde la Confederación de Empresarios de Andalucía, CEA, su secretario general, Santiago Herreros, calificó el plan recién aprobado como "el elemento esencial en la mejora de la competitividad, que además, recoge la necesidad de fomentar las vocaciones empresariales". El titular de Educación, Manuel Pezzi, cuya Consejería está, junto con la de Trabajo, directamente implicada en el plan, se mostró convencido de que la FP "que ha sufrido un deterioro con el paso de los años y que se ha considerado de segundo nivel, va a aumentar espectacularmente el número de alumnos" que se matriculen en estas enseñanzas, consideradas superiores aunque no universitarias. "Tendrán la misma capacitación y excelencia que la universidad", añadió Pezzi. Pero lo que todos los presentes en la firma destacaron, es la vinculación directa con el empleo que favorecerá el plan. Para Guillermo Gutiérrez, consejero de Trabajo e Industria, el proyecto "servirá para encontrar empleo aunque sean personas de edad y condición distinta". El proyecto incluye también la creación de un sistema de orientación profesional para facilitar la inserción laboral de los jóvenes y el aumento de las prácticas de alumnos en empresas.