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ANDRÉS ZALDÍVAR

"Pase lo que pase, la transición en Chile ya está tocada"

Yolanda Monge

El presidente del Senado de Chile, Andrés Zaldívar, está viviendo su papel más difícil como demócrata desde que el pasado 16 de octubre fuese detenido en Londres el ex dictador chileno Augusto Pinochet. "Hay que ser demócrata hasta que duela", declara, tras asegurar que no ha venido "a liberar al general ni a defender lo que fue su Gobierno, sino a pedir que nos dejen hacer justicia a los chilenos porque no somos un país inválido"."Sólo quiero que se entienda que todo esto afecta indiscutiblemente al proceso democrático chileno. Pase lo que pase, incluso aunque Pinochet regrese a Chile, la transición en nuestro país ya está tocada", relata.

Aun así, el candidato democristiano a la presidencia chilena en las elecciones de diciembre de 1999 asegura que no hay riesgo de involución política, de que los militares asuman el poder o de que la polarización que vive la sociedad chilena sea un peligro real para el país. Aunque sí reconoce que el caso Pinochet podría llegar a afectar a las elecciones. "Sería un error gravísimo para la estabilidad del país que se rompiera la Concertación [coalición de centro-izquierda en el poder]. Más bien tiene que suceder todo lo contrario. Este caso tiene que servir para reforzarla", manifiesta Zaldívar.

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Cuando a quien tuvo que vivir exiliado tres años en España a causa del régimen militar del hoy senador vitalicio se le pregunta sobre si la democracia y la justicia chilenas están capacitadas para juzgar al ex dictador en Chile, responde rápidamente que él hubiera lanzado "la misma pregunta a España hace 10 años". "Esa posición no es legítima. Ustedes tuvieron derecho a hacer su transición", recalca una vez más Zaldívar, a la vez que se cuestiona en voz alta si la sociedad española no hubiera preferido no tener que esperar a la muerte del general Franco para lograr el fin de la dictadura antes que verle convertido en senador vitalicio. "Yo no quiero que a Pinochet se le reconozca la inmunidad soberana. Nadie puede asesinar impunemente. Pero sí soy partidario de que se le reconozca la inmunidad diplomática, porque la tiene", puntualiza.

El hombre de Estado que afirma defender un principio y no a una persona, consideró ayer que algo falla en el sistema español, ya que permite que un juez haga lo que quiera y ponga en peligro las relaciones internacionales. "No reconocemos la jurisdicción de Garzón para juzgar al senador. Sus argumentos son sumamente débiles", afirmó tajante Zaldívar antes de solicitar una vez más al Gobierno español que permita que Pinochet vuelva a Chile. "Y no precisamente porque le queramos mucho".

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Sobre la firma

Yolanda Monge
Desde 1998, ha contado para EL PAÍS, desde la redacción de Internacional en Madrid o sobre el terreno como enviada especial, algunos de los acontecimientos que fueron primera plana en el mundo, ya fuera la guerra de los Balcanes o la invasión norteamericana de Irak, entre otros. En la actualidad, es corresponsal en Washington.

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