Los Verdes de Alemania eligen a dos mujeres para dirigir el partido

Los Verdes se han convertido en el primer partido de la República Federal de Alemania que ha confiado sus dos principales puestos directivos a mujeres. El socio menor de la coalición gubernamental adoptó esta decisión durante el congreso que celebró durante el fin de semana en Leipzig bajo el signo de su adaptación progresiva al ejercicio del poder.El contencioso sobre la compatibilidad de los puestos directivos del partido, por una parte, y los cargos gubernamentales y escaños parlamentarios, por la otra, se saldó con un compromiso. Los delegados rechazaron la propuesta de los realistas a favor de abolir las normas internas vigentes (la incompatibilidad de las funciones) en favor de una solución más gradual: de los 30 miembros del consejo del partido, un nuevo órgano de dirección, sólo 12 podrán desempeñar funciones gubernamentales o parlamentarias.

El consejo del partido tiene por fin coordinar mejor el trabajo del grupo parlamentario, los miembros del Gobierno y las organizaciones regionales. Junto a él, continúa existiendo la presidencia federal, un órgano colectivo que reduce el número de sus miembros de nueve a cinco, todos los cuales estarán representados en el consejo.

En la lógica de Los Verdes, el nombramiento de Gunda Röstel y Antje Radcke como dirección bicéfala de Los Verdes reequilibra la transgresión de principios que supuso el nombramiento de dos hombres (Joschka Fischer y Jurguen Trittin) y una mujer (Andrea Fischer) para los tres puestos ministeriales que correspondieron a Los Verdes en el Gabinete rojiverde de Gerhard Schröder.

Portavoces sin cargo

Las dos nuevas dirigentes verdes (oficialmente denominadas "portavoces de la presidencia") son ambas pedagogas de profesión, sin cargo gubernamental o escaño en el Bundestag. Röstel, de 36 años, procede de la antigua República Democrática Alemana, pertenece al sector de los realistas, se interesa por los asuntos económicos y sociales y está a favor de un partido fuerte que no sea un apéndice del Gobierno ni una "sociedad de electores" de Joschka Fischer, el ministro de Exteriores y el más popular de Los Verdes. Antje Radcke , de 38 años, es la jefa de la organización de Hamburgo, se encuadra en el ala izquierda de Los Verdes y se dedica a temas de asilo, mujeres y política juvenil. En la clausura, cada una mostró su propio estilo. Mientras Röstel manifestó que Los Verdes deben abrirse al centro, Radcke se refirió a la necesidad de mantener la credibilidad y exhortó al partido a mostrar su personalidad con independencia del Gobierno.Röstel anunció un amplio debate sobre el nuevo programa, a aprobar antes de las elecciones parlamentarias del 2002. El programa actual, basado en la democracia asamblearia, se ha quedado desfasado en algunos aspectos tras 18 años de existencia.