Los cuatro países de Mercosur acuerdan la supresión progresiva de las aduanas

La decimoquinta cumbre de los jefes de Estado del Mercosur culminó ayer en Río de Janeiro con la aprobación de un importante proyecto para acabar con las aduanas entre los cuatro países del bloque (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay). El plan, llamado Canal Mercosur, facilitará progresivamente la importación y exportación de mercancías dentro del mercado común suramericano. Brasil y Argentina acordaron imponer, a partir del 2000, un arancel externo del 35% para la importación de automóviles desde fuera del bloque.

Los presidentes de los países del Mercado Común del Sur (Mercosur) dieron ayer luz verde al llamado Canal Mercosur, una revolucionaria herramienta que podrá acabar con las aduanas en las fronteras entre los países de la región. Los jefes de Estado del Mercosur -Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay- se comprometieron al cierre de la XV cumbre presidencial del bloque a comenzar el proceso para acabar con los trámites burocráticos que dificultan el comercio dentro de la región.La decisión de simplificar los procedimientos administrativos que dificultan el comercio intrarregional y de suprimir las aduanas fronterizas en todo el Mercosur fue aprobada por el Consejo del Mercado Común (CMC), la principal instancia ejecutiva del bloque regional.

El acuerdo para facilitar trámites, según explicó un diplomático argentino, permitirá que el comercio entre los países del Mercosur se realice de forma directa y sin que los productos sean revisados en las aduanas de las fronteras, de los puertos o de los aeropuertos. El decreto que establece la simplificación progresiva de los trámites aduaneros es, en realidad, el bautizado con el complicado nombre de Medidas de Simplificación de la Operatoria de los Trámites de Comercio Exterior y de Frontera, que también establece un programa de trabajos para aprobar una normativa que permita una mayor agilidad en la tramitación de los despachos de importación y exportación en el comercio entre los países miembros.

Pese a que la mayoría de los acuerdos para ser firmados por los presidentes tienen carácter social y político, el decreto sobre el Canal Mercosur convirtió la cumbre de Río de Janeiro en una de las más importantes de los últimos años en materia comercial.

Acuerdo automovilístico

En el marco de la cumbre de Río de Janeiro, Brasil y Argentina llegaron a un acuerdo para imponer, a partir del 1 de enero del 2000, un arancel externo común (AEC) del 35% para automóviles, camiones y remolques, del 18% para tractores y del 14% al 18% para componentes y piezas de automóviles. Esos porcentajes, anunciados ayer por los ministros de Industria y Comercio de los dos países, tendrán que ser sometidos a consideración de sus socios, los Gobiernos de Uruguay y Paraguay, para que puedan regir en todo el bloque comercial.Los dos países menores se oponen a que Mercosur imponga un arancel externo común superior al 35% para automóviles de fuera de la región, como lo acordaron Brasil y Argentina, debido a que ello encarecería sus importaciones de vehículos europeos, asiáticos y estadounidenses. Las divergencias entre Argentina y Brasil, los dos mayores socios del Mercosur y ambos con una industria automovilística considerable, y Uruguay y Paraguay, con una industria incipiente, impidieron que los cuatro países acordaran una política común para el sector.

La cumbre también selló acuerdos sanitarios, laborales, sobre educación y solución de discrepancias internas.