Tejidos
El ejército inglés ha inventado un traje que es transpirable e impermeable al mismo tiempo. Algo que protege sin asfixiar, en fin. Todo un descubrimiento. Tengo delante de mi casa un colegio y muchas mañanas veo llegar a los niños francamente cianóticos a causa de las bufandas y los gorros con que los envuelven sus madres o sus padres. Los protegen, desde luego, pero a cambio de ahogarlos. No digo que no se haya inventado el amor transpirable e impermeable, pero cuando hace frío, como hoy, tiende a escasear. Quizá todos los amores profundos, todas las relaciones humanas importantes sean un poco así, qué le vamos a hacer.Claro que el ejército no impermeabiliza a sus soldados por amor, no nos engañemos, sino para que le duren más. A veces, el cálculo es más piadoso que el cariño, de ahí que mucha gente abogue por el matrimonio de interés frente al flechazo asfixiante y totalizador. Otra característica de ese tejido militar es que no se mancha ni se arruga. Repele la suciedad enérgicamente de modo que te puedes poner el uniforme todos los días como si lo acabaras de estrenar. Parece el tergal elevado a la enésima potencia.
El ejército inglés ha descubierto, pues, una compresa de cuerpo entero. Los anuncios de las compresas, al menos, aseguran todo lo que proporciona este uniforme: libertad de movimientos, transpiración, limpieza, seguridad, buen olor... La única diferencia entre un tejido y otro es que el de la compresa es muy absorbente, mientras que el del ejército repele prácticamente todo, incluso las ideas. Lo ideal sería que repeliera y absorbiera al mismo tiempo, pero eso es más difícil que impermeabilizar sin ahogar o quemar sin asfixiar, o que tener fin sin perder la razón. En cualquier caso, para ser un invento del ejército no está nada mal. Enhorabuena.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.