Cebrián pide un "cambio educativo" para aprovechar las nuevas tecnologías

El sistema educativo debe acoger las nuevas tecnologías no de una forma instrumental, sino con "un cambio de mentalidad, tan grande, o aún mayor que el que experimentó el sistema educativo de la época con motivo de la invención de la imprenta", según Juan Luis Cebrián, consejero delegado de PRISA. Cebrián participó ayer, con la ponencia El profesorado ante las nuevas tecnologías, en la XIII semana monográfica Aprender para el futuro. Nuevo marco de la tarea docente, organizada por la Fundación Santillana. También participaron el rector de la Universitat Oberta de Catalunya, Gabriel Ferraté; Felipe Segovia, presidente de la Institución Educativa SEK; y Emiliano Martínez, vicepresidente del Grupo Santillana.

Cebrián considera que este profundo cambio cultural pone en entredicho la institución misma de la escuela y de la universidad, y altera de raíz la función y las necesidades de formación de los profesores.Cebrián augura que la globalización que impulsa "casi hasta el paroxismo" las nuevas tecnologías hará casi inútiles los planes de estudio "si desprecian el carácter multicultural, multirracial y multirreligioso de la sociedad del siglo XXI". En su caracterización de la nueva sociedad, el conferenciante afirmó que las nuevas tecnologías no son de sustitución, sino de integración; es decir, no sirven para hacer lo mismo mejor o más rápidamente, sino que propician la creatividad y permiten realizar actividades nuevas.

Además, la autoridad tiende a diluirse en la red y, de hecho, los profesores ya sienten cierto complejo de inferioridad ante sus discípulos, que se manejan mejor que ellos frente al ordenador. La sociedad digital, considera Cebrián, es un mundo cooperativo en el que "todos tienen algo que aprender y algo que enseñar". Como consecuencia de "una formidable homogeneización cultural", se producirá "una igualación progresiva, y quizá abrasiva, de valores y saberes", añadió.

Al relacionar la sociedad de la información con la del aprendizaje, Cebrián dijo que "los maestros deben comprender que los videojuegos son uno de los mejores instrumentos de enseñanza que nadie hubiera podido imaginar". "Incluso en la alta investigación se aprende más jugando que estudiando", dijo.

Cambio cultural

"Es necesario que todos, maestros, expertos y responsables políticos, asuman cuanto antes la importancia y calidad del cambio cultural que estamos abocados a experimentar, si queremos de veras ser capaces de conducir ese cambio por los senderos adecuados", dijo Cebrián. "No basta con poner un ordenador en cada aula, ni con enseñar al profesor a usarlo tan bien como sus alumnos", como tampoco basta con dotar a las escuelas de las infraestructuras adecuadas. Según Cebrián, es preciso asumir el cambio cultural y desarrollar los servicios que ofrecen las tecnologías, como el correo electrónico entre alumnos y profesores, la implantación de autoevaluación y evaluación mutua, y la flexibilidad en la organización del programa y el horario.Esto es lo que ya se está experimentando en las llamadas Aulas Inteligentes, defendidas ayer por Felipe Segovia, en su ponencia El perfeccionamiento del profesorado y las nuevas tecnologías de la educación. Estas clases, donde los alumnos se agrupan según el nivel, asistidos por un grupo de profesores y en las que ya están presentes las nuevas tecnologías son necesarias no sólo como modelo educativo sino también para perfeccionar la labor del profesorado. Segovia advirtió de que uno de los principales obstáculos para el aprovechamiento de las nuevas tecnologías es la resistencia al cambio de los profesores. Por eso, la clave está en motivar al profesorado, "ofrecerle un nuevo horizonte educativo".

Emiliano Martínez coincidió en el papel protagonista de los profesores frente al desafío tecnológico, pero incidió en la responsabilidad política: "Más allá de lo instrumental", afirmó, "se requiere un salto cualitativo que movilice la educación, poniéndola en el primer plano de las prioridades políticas". Un sendero que ya recorren, en su opinión, algunos Gobiernos, como el laborista británico de Tony Blair.

El vicepresidente del Grupo Santillana, que leyó la ponencia Los profesores en la sociedad del conocimiento y la información, ve en las nuevas tecnologías "la gran oportunidad de los educadores para ganar terreno", para reforzar su formación y mejorar su práctica profesional.