Cuba acoge a Matutes con los brazos abiertos, pero reclama respeto a su proceso político

El Gobierno de Fidel Castro recibió ayer al ministro español de Asuntos Exteriores, Abel Matutes, con los brazos abiertos en un gesto que refleja su deseo de abrir una nueva etapa en las relaciones con España. Con un sonoro "Abel, estás en tu casa", Matutes fue recibido en el aeropuerto de La Habana por Roberto Robaina, su homólogo cubano, con quien hoy sostendrá el primer encuentro de una agenda de trabajo en la que los temas fundamentales son la fecha y contenidos del viaje de los Reyes y el diálogo entre ambos Gobiernos. La Habana considera que un diálogo fluido con Madrid favorece su proyecto de mejorar sus relaciones con la Unión Europea.

, Además el Gobierno cubano considera imprescindible ese diálogo para el éxito de la próxima cumbre iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno, que se celebrará en la isla a finales del próximo año. En cualquier caso, Cuba pedirá a Matutes respeto hacia su proceso político y reiterará sus conocidas posiciones en relación con los derechos humanos.Hoy el presidente cubano acudirá a la recepción que ofrecerá el ministro de Exteriores en la embajada española en La Habana, en un gesto de deferencia hacia Matutes. Castro considera que éste ha realizado una labor positiva en la normalización de relaciones entre ambos gobiernos.

Una de las grandes incógnitas por despejar es si Matutes se entrevistará con miembros de la disidencia cubana, algo que ninguna fuente española ha querido confirmar. Uno de ellos, Elizardo Sánchez, presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional, declaró ayer que no ha solicitado ninguna entrevista con él. En su opinión, no es imprescindible ese encuentro, ya que podría provocar suspicacias en las autoridades cubanas y repercutir negativamente en los resultados de la visita del ministro español.

Sin embargo, otros opositores, como el democristiano Osvaldo Payá, consideran que, si Matutes no se reúne con la disidencia , el Gobierno español enviará un mensaje equivocado al de Fidel Castro. Payá considera "indignante" lo ocurrido durante la reciente visita de Manuel Fraga, presidente de Galicia. Según Payá, José María Aznar ha pasado del enfrentamiento a mantener una actitud de "complacencia total hacia el orden que el régimen está manteniendo en Cuba".

Uno de los motivos de la diplomacia española para no anunciar su contacto con la oposición es no frustrar su más que probable entrevista personal con Castro. En mayo, éste no recibió al ministro de Exteriores de Brasil, Luis Felipe Lampreia, quien previamente se había reunido con Sánchez.

Los derechos sociales

Robaina ha manifestado que está dispuesto a hablar con Matutes de "cualquier tema", incluido el de los derechos humanos, pero siempre sobre la base del respeto al proceso político de la isla. Cuba, mantiene, no está dispuesta a recibir lecciones de nadie en cuanto a derechos sociales, que, en su opinión, "son los más humanos de todos".Sin embargo, las conquistas sociales de las que presumen las autoridades -sobre todo, en sanidad y educación- se encuentran gravemente mermadas por la crisis económica que padece la isla desde el derrumbamiento de la antigua Unión Soviética. Cuba desea que España abra nuevas líneas de crédito que permitan impulsar su desfallecida economía. Pero para ello es necesario renegociar la deuda con ella, que supera los 1.000 millones de dólares, más de 140.000 millones de pesetas.

Pese a todas sus dificultades, Cuba sigue despertando el interés de los inversores españoles, como el propio Matutes pudo comprobar a su llegada a La Habana. Dos horas después de aterrizar, ofreció en el hotel Meliá Cohiba una recepción a los hombres de negocios españoles. A ella acudieron más de un centenar de empresarios, entre los cuales se encontraba un grupo que acudió a la XVI Feria Internacional de La Habana, el más importante encuentro comercial que se celebra en la isla cada año.

Más de 200 empresas españolas participaron con stand propio en esta edición de la feria, a la que asistieron 800 extranjeras, representativas de 60 países.

España fue el país mas representado en el certamen. No es de extrañar si se tiene en cuenta que en el primer semestre de este año las exportaciones españolas a la isla crecieron más de un 25%, batiendo todos los récords históricos. En este mismo periodo las importaciones de Cuba aumentaron algo más de un 30%.

En 1997 las exportaciones españolas a la isla ascendieron a 470 millones de dólares, cifra que ya entonces supuso un récord. Se espera que el crecimiento alcanzado en el primer semestre de 1998 se mantenga hasta final de año, lo que situaría a España como el primer suministrador y socio comercial de la isla, por encima incluso de Rusia, hasta ahora en primer lugar por los intercambios de petróleo por azúcar.