EEUU intentará en la cumbre del APEC forzar la apertura de los mercados asiáticos

Los 21 países miembros del Foro de Cooperación Económica para Asia y el Pacífico (APEC, en sigla inglesa) celebrarán su sexta cumbre los próximos días 17 y 18 de noviembre en Malaisia.

La APEC, creada en 1991 para estrechar los lazos comerciales entre los países del sureste asiático y del Pacífico, a través de la apertura y asociación de los mercados, tiene este año una crucial importancia para Estados Unidos, principal socio comercial exterior de la región.

Esta zona del mundo es la que provoca el mayor déficit en la balanza comercial estadounidense -se calcula que el déficit con Asia llegará a los 31billones de pesetas en 1998- y una de las menos abiertas a las exportaciones del país de América del Norte. Mil veces, la Secretaría de Comercio estadounidense ha reclamado a los países de la región, especialmente a China y Japón, que derriben muchas de sus barreras aduaneras, acusándoles de competencia desleal.

La exigencia de EEUU hacia China para que abra su mercado ha marcado, por ejemplo, todo el proceso de entrada del país asiático a la Organización Mundial de Comercio (OMC).

Paradójicamente, la cumbre de este año se celebra en Malaisia, el país que acaba de cerrarse a las finanzas internacionales, y será presidido por su primer ministro, Mohamad Mahathir, conocido opositor a una mayor apertura del mercado.

Por esta razón, y por las constantes negativas de Japón y China a abrir ciertos sectores de su economía, pocas son las novedades que los expertos y el propio Gobierno de EEUU esperan de esta cumbre. No obstante, los estadounidenses se empeñarán en conseguir del APEC una mayor apertura al menos en nueve sectores comerciales: pesca, productos forestales, equipamiento médico, tecnología medioambiental, química, energía, juguetes, joyería y telecomunicaciones.