Schröder coincide con Los Verdes en la necesidad de crear un pacto por el empleo

Los negociadores del Partido Socialdemócrata Alemán (SPD) y de Los Verdes perfilaron puntos comunes, pero también divergencias en la primera ronda de negociaciones, que se inició ayer en el land de Renania del Norte-Westfalia en una atmósfera de "franca" cooperación. Los futuros socios gubernamentales, que están decididos a llegar a un acuerdo, quieren iniciar un pacto por el empleo para dar trabajo a 100.000 jóvenes en cuanto se hagan cargo de sus responsabilidades. Discrepan, sin embargo, en el calendario para abandonar la energía nuclear.

Oskar Lafontaine, el presidente del SPD y futuro superministro de Finanzas en el Gabinete, dejó sentir ayer su estilo e influencia en la rueda de prensa que siguió a la primera ronda de negociaciones. El estratega de los socialdemócratas indicó que estaba dispuesto a ser riguroso con las cuentas, pero no a aceptar como dogmas las opiniones de los banqueros, ni siquiera las del Bundesbank. La existencia de recursos financieros para pagar las medidas que pacte la coalición serán un elemento clave durante las negociaciones iniciadas ayer.Para empezar, según dijo Lafontaine, el nuevo Gobierno hará una inspección contable con el fin de averiguar cuál es la situación presupuestaria que deja Theo Waigel, el anterior ministro de Finanzas. Lafontaine agregó que la herencia del Gobierno "no es muy risueña" y que el nuevo Gabinete "tiene poco margen de maniobra". El político dio a entender que el Bundesbank, la entidad emisora alemana, debe estar sometida, como cualquier otra, al debate público, ya que no es "una institución sagrada con el dogma papal de la infalibilidad", sino un conjunto de personas que antes, como secretarios de Estado o ministros, "ni siquiera habían tomado las decisiones correctas". Por tanto, "teóricamente se puede pensar que tal vez tampoco ahora toman siempre decisiones inatacables", señaló Lafontaine, quien, sin embargo, subrayó: "Nadie pone en cuestión la independencia del Bundesbank".

Las disquisiciones sobre el Bundesbank surgieron cuando los periodistas insistieron en comentar declaraciones anteriores de Lafontaine, según el cual existe aún un margen para disminuir los tipos de interés. El político manifestó ayer que el Fondo Monetario Internacional (FMI) tiene razón al afirmar que en Europa hay margen para una reducción de los tipos de interés.

Tal como aparentemente está planteado, el Ministerio de Finanzas que ocuparía Lafontaine tendría bajo sus competencias los temas centrales de la política económica, fiscal y también los asuntos europeos. El portavoz de la dirección de Los Verdes, Jürgen Trittin, apoyó ayer a Lafontaine y afirmó que, al igual que el Banco Central Europeo es independiente, se les debe permitir a los políticos expresar sus pensamientos sobre el momento oportuno de tomar medidas como la reducción de los intereses.

Las conversaciones de coalición continuarán el miércoles próximo, día en que se abordará la lucha contra el paro y el Pacto por el Empleo, así como la reconstrucción económica en el Este. En total se han previsto siete rondas, que deben concluir el 18 de octubre, pero que pueden prolongarse hasta los congresos respectivos de los Verdes (el 23 y el 24 de octubre) y el SPD (el 25 de octubre). El 17 de octubre, bajo el epígrafe de "cuestiones estructurales", debe abordarse la composición del Gobierno.

El futuro canciller, Gerhard Schröder, y el canciller en ejercicio, Helmut Kohl, se encontrarán por primera vez cara a cara hoy, si se confirma la asistencia del segundo a la fiesta del octavo aniversario de la Unidad Alemana, que este año se celebra en Hannover, la capital de Baja Sajonia.

La Unión Cristiana Democrática (CDU) continúa una erosión que afecta ya de forma abierta a la figura de Helmut Kohl, que se libró de críticas personales durante los primeros días tras el desastre electoral. "El partido debe separarse inmediatamente y sin consideración de Kohl y de los que han luchado con él", afirmó el ministro de Economía de Sajonia, Kajo Schommers, en el diario Express de Bonn.