Cuerda culpa a los promotores del alto precio de los pisos libres en Vitoria
El alcalde de Vitoria, José Angel Cuerda, replicó ayer a las críticas del consejero de Vivienda, Patxi Ormazabal (EA), sobre la carestía de los pisos en la ciudad con una avalancha de datos sobre la labor municipal en materia de pisos protegidos. Cuerda dejó de lado el punto central del informe del Gobierno vasco, que censura la responsabilidad del consistorio en los elevados precios de la vivienda libre por el alto precio a que vende el suelo. Según el estudio, hecho público esta misma semana sobre la oferta inmobiliaria en Euskadi, un piso libre nuevo en Vitoria cuesta una media de 38 millones de pesetas frente a los 32 de San Sebastián y 21 de Bilbao. Cuerda sólo se refirió a esta cuestión para descargar toda la culpa en los promotores privados quienes, a su juicio, "retienen los terrenos y retrasan la construcción de pisos hasta el último momento, esperando que el mercado les sea propicio para cobrar más y ganar más dinero". Tras enumerar una vez más los bloques de viviendas protegidas que el Ayuntamiento está impulsando (869 más las 814 que edificará la Caja Vital), el primer edil vitoriano arremetió contra Patxi Ormazabal, al que reprochó que se dedique a convertir el tema "en un combate de boxeo en vez de cooperar y colaborar para mejorar el estado de cosas".
