La izquierda alerta sobre las intervenciones clandestinas

Las referencias al aborto clandestino han salido a la luz más que nunca en los últimos días. Cristina Almeida, presidenta del Partido Democrático Nueva Izquierda, se refirió ayer a esta práctica acusando a la Iglesia de ser partidaria del "aborto clandestino" por oponerse a cualquier método anticonceptivo que evite los embarazos no deseados. Según Almeida, con la ampliación de la ley se pretende conseguir una mayor seguridad jurídica en la regulación del aborto.Respecto a la libertad de voto que los partidos nacionalistas otorgarán a sus diputados, Almeida señaló que se trata de "una hipocresía absoluta" y acusó de "intolerantes absolutos e intransigentes" a algunos sectores de la sociedad que se oponen a la ampliación.

La eurodiputada canaria Ángela Sierra considera "vergonzante el estado de clandestinidad existente en la práctica del aborto por culpa de una legislación que ha sido ya superada por la sociedad". A su juicio, la sociedad se ha adelantado a los "estrechos esquemas mentales" de quienes cuestionan la autonomía y responsabilidad de la mujer en decisiones que afectan íntimamente a su vida.

Esta representante de Izquierda Unida Canaria se mostró contundente: "Clama al cielo que, pese a las solemnes proclamas de quienes pretenden tratar como asesinas a mujeres en situaciones personalmente graves, muchas de ellas se juegan el físico en clínicas clandestinas, en las que pagan precios abusivos para poder realizar un aborto libre".

Presión de la Iglesia

La portavoz de Izquierda Unida en el Congreso, Rosa Aguilar, denunció también la campaña de presión que está realizando la Conferencia Episcopal sobre el Congreso.El secretario general del PSOE, Joaquín Almunia, manifestó que es la sociedad, y no sólo las mujeres, la que pide que se despenalice la interrupción del embarazo. Su compañera de partido María Teresa Fernández de la Vega, ex secretaria de Estado de Justicia, dijo que el Partido Popular nunca se colocará en posiciones de centro con actitudes como la que mantiene en el tema del aborto.

La diputada del PP y alcaldesa de Málaga, Celia Villalobos, manifestó que, aunque no coincide con la "idea global" de su partido sobre el aborto, cumplirá "por coherencia política" el programa electoral popular: "Me presenté a las elecciones con un programa y lo voy a cumplir, al margen de la opinión personal que yo pueda tener. Voy a votar lo que en la anterior ocasión: no".