Rasskin demanda a Mapfre para que restituya su escultura

El escultor Abel Rasskin ha demandado a Mapfre Vida y a la Fundación Cultural Mapfre Vida con el fin de que se restituya a su estado primitivo un conjunto escultórico realizado en 1988 por encargo para la fachada del salón de exposiciones de la fundación.La demanda ha sido consecuencia de la sentencia dictada por el juez de primera instancia número 21 de Madrid, que en diciembre del pasado año reconoció el derecho moral del escultor a la integridad de su obra frente a deformaciones, mutilaciones o la destrucción y le concedió una indemnización de un millón de pesetas por los daños morales.

Parte de la obra fue ocultada tras otro mural, cuya instalación, en 1991, en principio era provisional, pero que todavía permanece, y posteriormente, en 1996, fue retirado un arco de acero de la obra de Rasskin, según Mapfre porque algunas personas que entraban o salían de la sala de exposiciones tropezaban con él. Mapfre replicó a la primera demanda que la obra de arte no era tal, sino que se trataba de un trabajo de decoración que Rasskin se había limitado a vigilar como un mero encargado de obra. Rasskin hace uso ahora de las acciones restitutorias de la obra a su estado original que la Ley de Propiedad Intelectual le concede, como indica la sentencia.