Nueva singladura
Hace ahora un año, cuando estrenamos columna, dejamos al capitán Chaves al frente de una travesía harto difícil. Contra viento y marea, se ha cubierto la singladura, pero el temporal no amaina. En el cuaderno de bitácora puede leerse: -Barómetro de verano: siguió la riada de ministros haciendo turismo por Andalucía, para impresionar. Pero ni AVE a Málaga, ni nos reconocen el censo, ni deuda histórica, ni grandes inversiones. (De puño y letra el capitán gusta de hacer comentarios al margen: Estos señoritos siguen creyendo que los andaluces somos tontos. Que continúen así. Andalucía será la tumba política de Aznar). -Escollos y marejadas: El problema estratégico del aceite se resolvió -con pantomima final- a gusto de Fischler y de la tal Loyola, que parecía un alma cándida. Los grandes terratenientes se repartirán la parte del león. La casquería, para los pequeños. Una horrible palabra, que creíamos olvidada, vuelve a asomar por el horizonte: latifundismo. (Si es lo de ellos. Grandes cortijos, grandes cotos vedados, y vallados. Subvenciones a manos llenas, monterías a placer. No cambian. Son los mismos de siempre. Y ahora con las bendiciones de Bruselas). Transferencias de Justicia. Aquí nos metieron un pepinazo por debajo de la línea de flotación. Cincuenta mil pleitos pendientes -hoy deben andar ya por los sesenta mil-, y un déficit de vértigo. (Con muchos negocios como éste nos vamos al garete). Vertido tóxico en Aznalcóllar. La avalancha ha venido y nadie sabe culpa de quién ha sido. Lo peor: que la vistosa nave de Doñana continúa llevando dos capitanes. Inadmisible. La gente está indignada. Para eso no necesitamos Estado de las Autonomías. (Tienen razón. A ver cómo salimos de ésta. Quiero decir, a ver a quién tiramos por la borda). Al Sur, marejadas típicas de levante: inmigración clandestina, pateras de la muerte. Algeciras, que quiere independizarse. Desde luego la ciudad tiene carencias terribles, pero el maximalismo puede volvérsele en contra. Y un grano muy feo en Marbella. (A este provocador le hemos consentido demasiado. No sé si actuamos tarde.). Puertos conquistados: las maniobras de acoso a la escuadra enemiga dieron su fruto en Diciembre: 34.418 millones más para Sanidad. (Claro que Cataluña, con la mitad de población, recibió casi el doble). También con el medicamentazo les pasamos por la proa. La Ministra de Educación recogió velas en Humanidades y, aunque no se enteró de nada, incorporó al dictamen importantes propuestas andaluzas. La aguja nos dio un susto en el barómetro de Navidad: "La ideología de los andaluces se desplaza hacia el centro". Alerta roja. Un próximo gobierno de la Junta podría salir de una nueva coalición, PP-PA, que están deseando. Los taifas Ortega-Pacheco-Rojas Marcos no hacen más que ofrecerse de mediadores con Madrid, y además se apuntan al contubernio de Barcelona, para atornillar futuras bisagras electorales. (Estos andalucistas, con tanto bandazo de babor a estribor, me van a volver loco. Y Aznar que no me recibe . Se acabó. Preparar cañones de proa).
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