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EE UU pretende ampliar las acusaciones contra Microsoft

Bill Gates tendrá que volver a declarar el próximo miércoles

Las acusaciones contra Microsoft se ampliarán en los próximos días si los abogados del Departamento de Justicia de EE UU obtienen permiso para sumar nuevos cargos y nuevas pruebas sobre el supuesto comportamiento monopolista de la compañía. El juez encargado del caso debe decidir si ese material puede acumularse de cara al juicio del 23 de septiembre. Entretanto, el jueves y el viernes tuvieron lugar las dos primeras sesiones del interrogatorio de Bill Gates, que continuará esta semana. Fuentes cercanas a la comparecencia aseguran que Gates estuvo evasivo.

El diario Seattle Times asegura que el Departamento de Justicia y los 20 Estados que han presentado la demanda contra Microsoft van a pedir al juez que admita nuevas pruebas contra la compañía. De ser admitidos, los documentos avalarán cuatro nuevas acusaciones: presionar a la compañía Intel para que no incluyera software de Netscape en sus productos; intentar repartirse el mercado de software de audio y vídeo con Apple; diseñar Windows de forma que sea incompatible con sistemas operativos de la competencia; y buscar un acuerdo exclusivo con la empresa RealNetworks para que sus programas sólo se distribuyeran con el sistema operativo de Microsoft.Los abogados de la compañía consideran poco riguroso que la demanda pueda ser ampliada cuando se encuentra ya en su fase final. Sin embargo, la ley permite la incorporación de nuevo material siempre que éste aporte pruebas sobre las acusaciones iniciales.

Al mismo tiempo, la compañía ha contraatacado judicialmente: solicita a Netscape la entrega de documentos internos con los que demostrar -según Microsoft- que esta empresa perdió su posición dominante en el mercado del software de Internet por culpa de una pésima gestión, y no por las prácticas empresariales de la compañía de Bill Gates. Microsoft asegura que hay correos electrónicos entre directivos de Netscape que achacan los males de la compañía a la gestión financiera y al diseño de sus productos, pero no al comportamiento voraz por parte de Microsoft.

Gates, evasivo

La declaración de Bill Gates ante los abogados de la acusación comenzó el jueves en el Edificio 8 del complejo Microsoft en las afueras de Seattle. En una sala de reuniones, sin ventanas, Gates fue interrogado durante 9 horas diarias. Sólo tres de sus abogados estaban presentes en la declaración, que está siendo grabada en vídeo ante la posibilidad de que la justicia determine que las cintas sean entregadas a la prensa. Está pendiente de resolución judicial la solicitud de varios medios de comunicación que querían estar presentes en los interrogatorios amparados por una ley de 1913 que permite la entrada de público en los casos antimonopolio.

Fuentes cercanas a la investigación citadas por varios medios aseguran que Gates se mostró evasivo y poco colaborador. Gates aseguró que se enteró por la prensa de un supuesto plan de su compañía para repartirse con Netscape el mercado de Internet. Muchas preguntas fueron formuladas repetidamente con distintos enunciados para tratar de encontrar contradicciones en su testimonio, pero Gates, que se mostró combativo, fue coherente con la línea de defensa de la compañía. Mark Murray, portavoz de la empresa, aseguró que los hechos no avalan la demanda del Gobierno. El interrogatorio continuará el próximo miércoles.

Esta semana se pone a la venta en EEUU un libro sobre el caso Microsoft que aporta más datos para la polémica: cuenta cómo en 1989 directivos de IBM descubrieron micrófonos en la habitación de un hotel de Nevada justo antes de una reunión con Bill Gates, y cómo éste mandó destruir pruebas cuando la compañía fue investigada en 1990.

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