El obispo oscense reclama rapidez en la devolución de los bienes

El obispo de Huesca, Javier Osés, considera una "injusticia" el retraso en la devolución de los bienes de las parroquias de la franja oriental de Aragón que pertenecieron a la diócesis de Lleida y fueron traspasadas a la Iglesia aragonesa. En su pastoral dominical, Osés expresaba ayer que la actual situación de "injusticia" derivada de las dificultades planteadas para el regreso de los tesoros de las parroquias "sólo se soluciona por el camino señalado por la Santa Sede: la devolución pronta y pacífica de esos bienes", decretada hace unas semanas por el nuncio del Papa en España, Lajos Kada. El prelado denunciaba asimismo la intervención en el conflicto de instituciones políticas catalanas ajenas a la Iglesia y contrarias al reintegro de los bienes que han solicitado en reiteradas ocasiones al obispado de Lleida. "Tengo el convencimiento", afirmaba Osés en la pastoral, "de que estamos ante una cuestión que, objetivamente, no admite dudas y que debe ser solucionada principalmente por las propias comunidades cristianas, y las intervenciones de otras fuerzas distintas de las eclesiales sólo pueden tener como objetivo ganar tiempo o lograr algunos dilatas que, en este caso, no tienen justificación". A juicio del obispo oscense, los bienes en litigio pertenecen desde su origen a las parroquias de Aragón y el título de propiedad "no puede quedar modificado por las circunstancias de urgencia que obligaron un día a que el obispo responsable de dichas parroquias trasladara los bienes a lugar seguro para defenderlos del robo o del deterioro irreparable".