Los expertos proponen que se creen unidades de cánceres familiares

Ganar la batalla al cáncer exige combatirlo antes de que aparezca y no sólo cuando ya está presente. La mejor forma de conseguir ese objetivo sería crear "unidades de cánceres familiares", según explicó ayer en Santander Félix Bonilla, jefe de sección del servicio de Oncología Médica de la Clínica Puerta de Hierro de Madrid. El investigador dirige esta semana un curso en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo sobre Biología y genética del cáncer. Marcadores genéticos y moleculares, junto a Manuel Perucho, responsable del departamento de Oncogenes y genes supresores de tumores del Instituto Burnham en La Joya (EEUU).

Según Bonilla, no hay que olvidar el efecto psicológico que produce el hecho de que a una persona se le coloque la etiqueta de que tiene un gen con predisposición a producir cáncer. Por esta razón, las unidades de las que habla deberían ser multidisciplinares, compuestas por oncólogos, cirujanos, psicólogos y expertos de laboratorio.

Las unidades funcionarían de la siguiente manera: una vez que una familia ha sido calificada de riesgo tras analizar sus datos, se decide si estaría indicado hacer un estudio con ella. Se iniciaría desde el nacimiento de cada miembro y el seguimiento se haría de forma global: toda la vida bajo control.

Perucho explicó que cuando se sabe que un miembro de una familia ha heredado un gen mutado, "no se puede evitar que le aparezca el tumor, pero si está precavido se puede hacer un rastreo rutinario a partir de la edad de más riesgo para detectarle el tumor tempranamente y entonces sí se puede curar".