El Festival Mozart impulsa un nuevo teatro de ópera en A Coruña

La primera edición del Festival Mozart ha desatado el entusiasmo operístico en A Coruña. La fabulosa versión de concierto de La Clemenza di Tito, que Víctor Pablo Pérez dirigió el sábado en el Palacio de congresos-auditorio, con un espléndido reparto vocal digno del festival de Salzburgo, coronó la primera aventura mozartiana de un nuevo certamen que aspira a convertirse en una cita imprescindible en el panorama musical español. La mezzosoprano Ann Murray, el tenor Philip Landgridge, las sopranos Patricia Schumann, Isabel Rey y Maite Arruabarrena, y el bajo Lorenzo Regazzo triunfaron por todo lo alto en una velada sin asomos de divismos en la que triunfó verdaderamente la música, con la cada vez más sensacional Orquesta Sinfónica de Galicia como anfitriona de lujo, y la notable participación del coro de la Comunidad de Madrid.Mientras el Festival Mozart de Madrid, organizado por la revista Scherzo, dejó de existir cuando había alcanzado su momento artístico más feliz, A Coruña ha recogido con entusiasmo el testigo y la filosofía del certamen madrileño. Ante el éxito, artístico y de público de la primera convocatoria, iniciada el pasado 30 de mayo, la ciudad ha puesto en marcha la transformación del palacio en teatro de ópera, cuyo escenario comenzará a construirse en noviembre. Con una completa reforma escénica que cuenta con un presupuesto inicial de 500 millones de pesetas, el nuevo escenario operístico, que será bautizado con el nombre de Teatro Nacional de la Ópera de Galicia, abrirá sus puertas en mayo de 1999, con una representación de El Barbero de Sevilla, de Rossini, dirigida por Alberto Zedda. El conocido título rossiniano abrirá la II Edición del Festival Mozart, que ofrecerá una versión escénica de Cosí fan tutte, de Mozart, bajo la batuta de Víctor Pablo Pérez, e Idomeneo, otra joya mozartiana, en versión de concierto bajo la dirección de Jesús López Cobos.

La posibilidad de convertir A Coruña en un escenario mozartiano de primera línea no es una broma. La pianista portuguesa Maria João Pires, que el día 21 de junio ofreció un recital schubertiano ante 1.400 personas, se quedó prendada de la ciudad y volverá en el 2000 para actuar con la Sinfónica de Galicia, que es la verdadera esencia y justificación del festival. Ann Murray y su marido, Philip Landgridge, quedaron entusiasmados ante la calidad de la orquesta gallega desde el primer ensayo. Los dos cantantes británicos, que protagonizaron la producción y grabación de La clemenza di Tito, de la Ópera de Zúrich, dirigida por Nikolaus Harnoncourt, aseguran que no todas las primeras y famosas orquestas de Londres pueden tocar un Mozart de este nivel de calidad.