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EL PSOE TRAS LAS PRIMARIAS

Un sector del Gobierno propone cambios para frenar a Borrell con ministros más centristas

Luis R. Aizpeolea

El debate sobre el estado de la nación, previsto para los días 12, 13 y 14, va a ser crucial para el Gobierno. El esperado enfrentamiento entre José María Aznar y el candidato socialista José Borrell será determinante para fijar la estrategia del Ejecutivo ante el nuevo escenario político. Una salida airosa de Borrell en ese debate animará a los sectores del PP que aconsejan ya a Aznar que centre más su política y cambie caras en el gabinete. La Moncloa busca el apoyo de los nacionalistas para atacar al nuevo líder de la oposición presentándolo como un "político aislado" e incapaz de establecer alianzas.

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El Gobierno prepara, a diez días vista, el debate sobre el estado de la nación con la mirada puesta en el candidato Borrell. Será la prueba de fuego que marcará su futura estrategia.Hasta que surgió la candidatura de Borrell, con su efecto de arrastre electoral, Aznar no se había planteado cambiar de planes, consistentes en agotar la legislatura y, a poder ser, ni siquiera remodelar su equipo de Gobierno. Desde hace una semana, en el PP y el entorno del Ejecutivo afloran las dudas.Tanto, que el Ejecutivo se ha planteado ya varias hipótesis. Ha descartado, por el momento, la mayor, esto es, la posibilidad de un adelanto electoral que pillara por sorpresa a un PSOE sometido a una crisis y a un congreso extraordinario, que finalmente se ha evitado. El acuerdo al que han llegado Joaquín Almunia y Borrell ha disipado por entero ese congreso de división.

El Gobierno estima que ahora José Borrell está en "la cresta de la ola" y sería absolutamente negativa una convocatoria anticipada de elecciones, pese a que Aznar cuenta ahora con los activos de la entrada de España en la Unión Monetaria y la reforma del IRPF. El temor a un "efecto Jospin" está latente. Moncloa confía en que Borrell "se cueza en su propia salsa" y "se vaya quemando", pues "le quedan dos años" como candidato.

Otra cosa es la posibilidad de cambios en el Gobierno. Sectores del Ejecutivo y del PP creen que la inesperada irrupción de Borrell en la escena obliga al Ejecutivo a reforzar su política y su imagen centrista, y apuestan por el relevo de determinados ministros, a lo que Aznar es reacio. Una salida airosa del candidato socialista en el debate de la nación podría modificar la posición del presidente.

La Moncloa prepara el debate con varias claves. Además de presentar a Borrell como un "radical", tratará de significar su aislamiento político en el Parlamento ante el coordinador de IU, Julio Anguita, y los nacionalistas. Los movimientos que el Gobierno realiza estos días entre sus socios nacionalistas no son ajenos a ello. La agilización de las inversiones en Cataluña y la vitalización de las conversaciones sobre la cuota del Inem con el PNV tratan de reforzar esta alianza.

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