Este año habrá más objetores haciendo la prestación que reclutas en la mili

España tendrá este año, por vez primera, más objetores realizando la prestación social sustitutoria (PSS) que soldados cumpliendo la mili. Así lo asegura el director general de Objeción de Conciencia, Carlos Lesmes, en una entrevista en la Revista Española de Defensa, órgano del Ministerio de Defensa. A finales de 1998, el ejército de objetores en la PSS superará los 100.000 mientras que sólo habrá 90.000 soldados de reemplazo en los cuarteles. Estas cifras dan idea de la amplitud social de un fenómeno que hace una década era minoritario.

"En 1998 pretendemos superar la cifra de los 100.000 [objetores en la PSS], lo que significa que, por primera vez, habrá más jóvenes cumpliendo la prestación social que el servicio militar", afirma Carlos Lesmes. El Ministerio de Justicia no ha cubierto los objetivos del plan de julio de 1996, que preveía llegar a 90.000 plazas aquel año, a 105.000 en 1997 y a 120.000 en 1998.Pese a ello, los 100.000 objetores cumpliendo la PSS serán más que los reclutas en los cuarteles. De los 165.000 mozos sorteados en noviembre pasado, 16.442 fueron declarados excedentes de cupo, otros 30.000 no se incorporan a filas por causas sobrevenidas y a la cifra resultante hay que restarle un 25% porque la mili sólo dura nueve meses. En total, los puestos reservados a los soldados de reemplazo rondan los 90.000.

El fuerte aumento de las plazas para cumplir la PSS no consigue absorber el incremento aún mayor de los objetores. El año pasado acabó con 127.304 solicitudes, un 36% más que en 1996. El ritmo se ha acelerado en los dos primeros meses de 1998, cuando se han presentado 18.378, un 41% más que en el mismo periodo de 1997 (13.002). De seguir esta tendencia, el año acabará con 180.000 objetores.

Sin embargo, la objeción no ha puesto en peligro las necesidades de los ejércitos, ya que (ver EL PAÍS del 9 de marzo) éstos sólo precisan a uno de cada seis jóvenes obligados a cumplir la mili hasta su desaparición.

"La objeción no perjudica a las necesidades de reemplazo del servicio militar, en el que hay excedente de personal pese al crecimiento del número de objetores", afirma Lesmes. ",Si no hubiera objetores, el excedente de cupo, que para el reemplazo de 1998 fue de 16.442 jóvenes, habría superado ampliamente los 100.000. De manera que hoy la objeción constituye una especia de drenaje natural del sobrante de efectivos de las Fuerzas Armadas", agrega.

En opinión de Lesmes, la reducción de la prestación social sustitutoria, que ahora dura 13 meses, a sólo nueve para equiparla al servicio militar -como han acordado el PP, CiU y Coalición Canaria- no causará un aumento importante del número de objetores. "Puede influir en algunos, pero no será un fenómeno masivo", pronostica.

Respecto al plazo máximo para que los objetores sean llamados a cumplir la PSS, que el Gobierno y sus socios han decidido fijar en tres años, afirma que, "en general, los jóvenes se incorporan en el año siguiente al de la solicitud [de objeción] salvo en algunas comunidades", como Cataluña, Madrid y el País Vasco.