La FAO advierte del riesgo de hambruna entre los albaneses
La amenaza del hambre se cierne sobre la provincia yugoslava de Kosovo como consecuencia del clima de violencia que atraviesa, según advirtió ayer la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), que lanzó una alerta especial para solucionar la situación.Para la FAO, el riesgo de una importante carestía de alimentos en Kosovo es real, por ello se hace un llamamiento a la comunidad internacional para que se elabore un plan de emergencia en previsión de que el conflicto se extienda a los países vecinos.
"Además de las pérdidas humanas como consecuencia directa de los combates, existe una creciente preocupación de que un conflicto continuado produzca una reducción en la producción de alimentos y suministros", subraya la alerta especial lanzada por la FAO.
"Numerosas granjas han sido destruidas, abandonadas o se han quedado sin ser atendidas, además la distribución de alimentos se ha visto dificultada debido a los problemas de comunicaciones", advierte la organización internacional.
En circunstacias normales, Kosovo es un área deficitaria en la producción de alimentos. Por si esto fuera poco, en los últimos años la producción de alimentos ha descendido debido a los conflictos en las regiones cercanas -Bosnia, Albania-, así como el empobrecimiento de suelo. "Si la violencia continúa, existe el temor de que pueda extenderse a los paises vecinos, como Albania, Macedonia y Bulgaria".
La FAO explica que este escenario podría darse si se incrementa significativamente el número de desplazados desde las áreas de conflicto. Esto "pondría en dificultados a las ya vulnerables economías de dichos países".
Provincia agrícola
La alerta de ayer asegura que miles de personas, en su mayoría mujeres y niños, han abandonado la zona más afectada -el municIpio de Sbrica- y se han trasladado a municipios adyacentes. Otro importante número de refugiados se ha desplazado a Montenegro para reunirse con sus familias.Las estadísticas revelan que la producción de trigo en Kosovo ha descendido en un 50% entre 1991 y 1996. No hay datos referentes a 1997, pero la FAO señala que es altamente improbable que la producción haya superado las 3 10. 000 toneladas de 1996. Además, las reservas alimenticias se han visto mermadas en los episodios de violencia y las granjas han perdido mano de obra debido a los hombres que han sido asesinados o heridos.
Kosovo es una provincia que depende más de la agricultura que el resto de Yugoslavia. La producción agrícola supone hasta un 30% del Producto Interior Bruto de la región, mientras que en el resto de Yugoslavia se eleva al22%.
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