El Gobierno ofrece a los bares de copas atrasar su cierre una hora más

El consejero de Economía, Luis Blázquez, se reúne hoy con los representantes del sector de bares de copas de Madrid para establecer los criterios definitivos a incluir en la nueva Ley de Espectáculos Públicos. Blázquez acude a la reunión con varias propuestas en la cartera, entre ellas que los bares de copas cierren una hora más tarde. Los propietarios de los locales nocturnos aceptan la ampliación pero exigen 30 minutos más para desalojar sus bares. A cambio se comprometen a no servir una copa más durante ese tiempo.El plazo del 31 de marzo marcado por ambas partes como fecha tope para establecer un consenso a partir del cual se definan las condiciones laborales del sector, se echa encima. Blázquez se reunió el pasado viernes con los representantes de los locales nocturnos y alcanzó un principio de acuerdo respecto a la prolongación en una hora del horario de cierre.

De confirmarse el consenso esta noche, la situación quedaría de la siguiente manera:

- Los bares de copas cerrarían a las 3.00 en las madrugadas de lunes a jueves.

- Los fines de semana, a las 3.30.

La propuesta del Gobierno regional incluye en otro apartado la distinción entre bares de copas y de tapas.

La Comunidad clasifica a los bares de copas por zonas y los define en tres tipos: - Locales que están en zonas urbanas bajo protección medioambiental como Malasaña o Huertas.

- Bares que están en zonas donde hay menos concentración de los locales nocturnos y que no molestan a los vecinos.

- Establecimientos alejados de los cascos urbanos, en carreteras o en polígonos de copas.

Para los primeros, que son los más polémicos porque reciben el mayor número de denuncias por parte de los vecinos, la Comunidad ofrece subvenciones para insonorizar esos locales.

La Comunidad otorgará a los ayuntamientos la facultad de ampliar el horario de cierre de los bares que estén apartados del casco urbano. Salazar rechaza esta posibilidad: "Los polígonos de copas son una Invitación a que aumenten los accidentes de coches y además se acaban convirtiendo en guetos donde se genera violencia como ya quedó suficientemente demostrado en el caso de Costa Polvoranca [donde murió un joven apuñalado]".