Endesa inaugura una central térmica de gran emisión de CO2, según los ecologistas

Greenpeace no se descolgó ayer por la aparatosa chimenea de Endesa ni abordó el puerto del grupo en Carboneras (Almería) La organización ecologista no se inmiscuyó con alguna acción espectacular en los fastos por la inauguración del segundo grupo de la térmica, que ha estado en su punto de mira en los últimos anos por sus efectos ecológicos. Sólo una nota recordó la lucha de Greenpeace contra la ampliación de la central por materializar "el mayor foco puntual de emisión de CO2 que se pone en marcha en esta década".Los ecologistas aseveran que el complejo térmico, el mayor productor eléctrico de Andalucía, alimentado con carbón, tendrá una capacidad total de emisión de 10 millones de toneladas anuales de anhídrido carbónico, gracias "al beneplácito del Gobierno y la complacencia de la Junta de Andalucía". "Está claro que la política climática del Gobierno la dictan los intereses de Endesa", indicó Juan López de Uralde, director de campanas de Greenpeace.

No hubo menciones explícitas para los ecologistas durante los discursos oficiales, a excepción del presidente andaluz, Manuel Chaves, que se mostró respetuoso con su oposición aunque "sin compartirla". Se abundó, sin embargo, en el respeto medioambiental de Endesa a la hora de construir el nuevo grupo.

El ministro de Industria y Energía, Josep Piqué, elogió la central de Endesa como "modélica" al compatibilizar la eficiencia económica con la eliminación de residuos y emisiones".

Endesa ha destinado 6.000 millones a medidas correctoras para minimizar la contaminación. Según sus datos, las nuevas tecnologías incorporadas permiten rebajar las emisiones de CO2 y partículas, además de reducir la generación de gases nitrosos. La empresa no concreta cantidades.