El Papa bendice a los cubanos desde las páginas del diario comunista 'Granma'
El diario comunista Granma, uno de los principales templos ideológicos de la revolución de Fidel Castro, se convirtió ayer en un púlpito improvisado y surrealista desde donde Juan Pablo II bendijo a todos los cubanos y les animó a celebrar la recién rehabilitada Navidad. El milagro sucedió el sábado, cuando Granma publicó íntegramente y en primera página el mensaje que envió el Pontífice al pueblo cubano con ocasión de la visita que realizará a la isla entre el 21 y el 25 de enero. En él, el Papa expresa su deseo de que, tras su viaje a la isla, la Iglesia "pueda seguir disponiendo, cada vez más, de la libertad necesaria para su misión y de los espacios adecuados para llevarla a cabo plenamente".
Se trata de la primera vez que la prensa oficial cubana publica el mensaje de un Pontífice. El mensaje del Papa, difundido también por la radio y la televisión, tiene un tono didáctico y Juan Pablo II manifiesta en él su "alegría" por el hecho de que el día de Navidad "haya vuelto a ser festivo también en el ámbito civil", en un reconocimiento explícito a la decisión de Castro de decretar festivo el 25 de diciembre, anunciada el pasado día 14.Según el Papa de Roma, esto dará "a todos la posibilidad de participar activamente en las celebraciones navideñas", así como la recuperación de "una tradición muy arraigada en el corazón de los cubanos". El Pontífice enfatiza de forma sutil que "la fiesta de Navidad, con sus múltiples expresiones llenas de sentido cristiano y de sabor popular, es parte del patrimonio cultural y religioso de Cuba", y no una tradición ajena a las características de la isla caribeña.
El mensaje del Papa, publicado por Granma en su habitual formato rojinegro -los dos colores de la bandera del Movimiento Veintiséis de Julio de Castro-, explica en tono sencillo y pedagógico qué es la Navidad y qué sentimientos deben prevalecer en estas fiestas, algo lógico si se tiene en cuenta que el ateísmo ha sido durante más de tres décadas la religión oficial en la isla y donde muchos cubanos jamás han celebrado una Navidad ni saben lo que es.
"En esta fecha", afirma el Juan Pablo II, "la misa de medianoche y los nacimientos, con su particular encanto, volverán a reunir en torno a la figura del Niño Jesús a familias enteras, alegres de acoger la luz y la paz que bajan del cielo y quieren iluminar el porvenir de todo el pueblo".
El Papa expresa su deseo de que los cubanos puedan celebrar la Nochebuena "animados por la esperanza, pues", afirma, "sin ella se apaga el entusiasmo, decae la creatividad y mengua la aspiración hacia los más altos y nobles valores".
Juan Pablo II, que se presenta como "mensajero de la verdad y la esperanza", dice también que desea "recorrer caminos de paz por diversas diócesis de Cuba", y anuncia que coronará a la Virgen de la Caridad, patrona de la isla, cuando viaje a la ciudad oriental de Santiago. La única referencia que hace a lo que debería "dejar" su viaje a Cuba se refiere a la apertura de nuevos espacios para la Iglesia católica en la isla.
Castro ya había informado el viernes pasado a los obispos cubanos, tras reunirse durante ocho horas con los cuatro miembros de su comité permanente, de su decisión de publicar íntegramente el mensaje del Papa en el diario Granma.
