España aportará dinero si se demuestra que compro oro nazi robado
España participará en el fondo mundial de restitución a las víctimas del holocausto, anunciado ayer en Londres por los Gobiernos británico y norteamericano, si se demuestra su responsabilidad en las compras de oro nazi. Enrique Múgica, presidente de la comisión investigadora española, se mostró muy prudente ante la creación de este fondo y añadió que, si entran en el mismo todos los países, "España no se mantendrá al margen".
La comisión española presentó ante el congreso un informe de cuatro folios con las líneas generales del estudio elaborado por los historiadores Pablo Martínez Aceña y Antonio Marquina. Pero la prudencia volvió a marcar su contenido. Pese a que España fue el segundo mayor comprador de oro al Banco Nacional suizo de este estudio, en principio, no se deducen responsabilidades para el Gobierno de Franco.Y sobre el oro se recuerda que el Gobierno de la República transfirió 510 toneladas de oro a la antigua Unión Soviética y que Franco recompuso sus reservas entre 1939 y 1945 con la compra de 67,419 toneladas en el extranjero. De las que 38,594 se adquirieron al Banco Nacional de Suiza y sólo 2,507 al Banco Alemán Trasatlántico. Se añade también que España devolvió 101,6 kilos de oro que procedían del expolio nazi al Banco Nacional de Holanda.
Robin Cook, ministro de Exteriores británico, y Stuart Eizenstat, subsecretario de Comercio de EE UU, abrieron ayer el congreso mundial sobre el oro nazi con una buena noticia para los supervivientes del holocausto: la creación de un fondo en el Banco de la Reserva Federal de Nueva York para restituir a las víctimas del nazismo. El Gobierno británico aportará al mismo un millón de libras (250 millones de pesetas), y el norteamericano, cuatro millones de dólares (600 millones de pesetas). Este último aumentará esta cifra hasta 25 millones de dólares (3.750 millones de pesetas).
"Las víctimas reales del nazismo no fueron los bancos centrales europeos, sino las personas que murieron por su religión, su raza o sus creencias", señaló Cook a los delegados de los 41 países y seis organizaciones no gubernamentales, la mayoría judías.
Además de este fondo, la Comisión Tripartita del Oro, creada después de la II Guerra Mundial, repartirá las 5,5 toneladas de oro que todavía quedan pendientes de entregar a los países saqueados. Pero lo hará con el compromiso de que esos países entreguen parte del mismo a los supervivientes del holocausto. Esta comisión la integran, desde hace 50 años, Francia, Reino Unido y Estados Unidos.
Enrique Múgica señaló que la participación española en este fondo deberá decidirla el Gobierno español. Y si se determina entrar en el mismo, "la aportación debería ser proporcional al perjuicio causado. Si se concluyen responsabilidades, estamos dispuestos a indemnizar a título individual, pero nos gustaría tener un control sobre esos fondos y saber cómo y a quién se les van a repartir". El presidente de la comisión española creada por el Gobierno de Madrid insistió en que no existe una responsabilidad colectiva. "Unos países son más responsables que otros. El caso suizo es el más claro y lacerante. En la España de Franco, a pesar de ser una dictadura, se acogió y protegió a los judíos".
Edgar Brongman, representante del Congreso Mundial Judío,seguró que las tropas de Hitler robaron, al cambio actual, 7.000 millones de dólares en oro, y que el 30% de esa cifra en oro no monetario procedía de las víctimas de los campos de exterminio, de sus viviendas y sus empresas. Según sus datos, el 85% de esos 7.000 milones de dólares se depositó en Suiza, y sólo 58 millones de dólares se devolvieron a los aliados. En su opinión, 1.600 millones de dólares en oro saqueado están todavía en poder de la banca helvética.
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