Siniestro Total hace suya la beligerancia jocosa en su álbum 'Sesión vermú'
El grupo publica su tercer disco del año
Con Sesión vermu, Siniestro Total cierra su año más productivo, discográficamente hablando. El año 1997 se inició con Cultura popular, su erudita revisión de la historia del rock español, acompañado de un vídeo de larga duración. Su gira americana generó un directo, Así empiezan las peleas, sólo editado al otro lado del Atlántico. Ahora se publica Sesión vermú, 13 contundentes canciones grabadas en Vigo y mezcladas en Memphis (Estados Unidos).
Conviene recordar que de Sesión vermú se adelantó, vía Internet, la pieza Joder, Cristina, coincidiendo con la boda de la Infanta. Los autores descubrieron que hay asuntos con los que no se puede bromear: "Nadie recogió la noticia y ni siquiera se atrevieron a programarlo en Tele 5, que nos habían pedido la cinta. Es cierto que somos un grupo antisistema, pero la canción es bonachona, no ofensiva. Los medios tienen demasiado miedo de que les cuelen goles".La actualidad y la cultura de masas todavía inspiran a Siniestro Total: "El instrumental Inspección rutinaria de caseríos viene de un día que estábamos en la casa de campo de unos amigos vascos. Llegaron montones de picoletos ,con motos y jeeps, y dijeron que se trataba de 'una inspección rutinaría del caserío' en busca de un secuestrado. En realidad, apenas revisaron nada: esencialmente querían comprar la sidra que se hacía allí". El título de otro tema, Bueno, pero no empecemos a chuparnos las pollas todavía, es un préstamo de Pulp fiction. Y El enemigo parpadea procede de la guerra publicitaria entre Coca-Cola y Pepsi -Cola, "aunque el resultado sea un himno libertario, La internacional del final del milenio, Javier Krahe pasado por Siniestro Total".
Esperpento
La portada de Sesión vermú recupera imágenes de una añeja revista estadounidense que compraron en Memphis: "Es una chica desnuda de espaldas; das la vuelta a la página y está de frente, pero con máscara antigás. Y pone 'Miss Glamour 1941'. ¡Para que luego digan que los yanquis no entienden el humor negro!" El humor constituye el combustible indispensable para Siniestro Total, que ha creado escuela con su racial inclinación por el esperpento y el chiste, "incluso el chiste fácil. Es cierto que eso se presta a que nos confundan con Los Inhumanos o cosas así. Un riesgo que asumimos, ya que tenemos la certidumbre de que la diversión no es lo contrario de lo serio; es lo opuesto de lo aburrido. Huimos de la solemnidad, recuerda a los políticos".La riqueza conceptual de Siniestro está reconocida en los lugares más insospechados: "Hay tesis escritas sobre nuestras estrategias de provocación y tenemos abundantes amigos y colaboradores desinteresados en varias universidades. También nos han pedido permiso para reproducir alguna letra en un texto de religión.
Y España se droga ha sido incluido en un libro publicado por el Ayuntamiento de... de... ". Intercala veloz otro de los músicos: "De Villaviciosa". Carcajadas. "No. De Santa Coloma".
La mera transcripción no puede hacer honor a una entrevista con Siniestro Total, donde las ocurrencias vuelan como las balas y abarcan todo tipo de asuntos: de la voluntad de grabar próximamente un disco de blues al vídeo porno de... Chuck Berry, y un florilegio de anécdotas engordado por su periplo por las Américas: "Aprendes mucho sobre cada país desde el escenario. En Perú el público era esencialmente indio y se carcajeaba con cada alusión sexual. En México los punkis invadieron el recinto gritando insultos al PRI. En Nueva Jersey nos encontramos con una colonia de emigrantes que vestían camisetas del Celta y sólo hablaban gallego o inglés. En Argentina hubo un tipo de traje y corbata que se desnudó y nos estuvo viendo en la primera fila mientras se tocaba. Esa violencia de contrastes resulta más saludable que la hipocresía que reina en España. Hace unos años, Aznar declaró que sus grupos favoritos eran Mecano y Siniestro. Nos olemos que no ha escuchado a ninguno de los dos, ni siquiera en la intimidad".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.