Octavio Paz reacciona con ironía al rumor sobre su muerte
El sobresalto llegó el martes, a eso de las nueve de la noche hora mexicana (cuatro de la madrugada en España): un teletipo de la agencia France Presse anunciaba con carácter de urgencia la muerte del escritor mexicano Octavio Paz, de 83 años y convaleciente de una operación de cáncer de próstata. Las alarmas se dispararon. A pesar de los desmentidos inmediatos de la familia y de sus más cercanos colaboradores, la duda prevaleció hasta que, una hora más tarde, la voz del Premio Nobel pudo escucharse en el telediario nocturno de la cadena Televisa."A mí me da mucha pena que los que se empeñan en matarme lo hagan con tanta prisa. Hay que tener un poco de calma", dijo irónico el poeta. "Yo creo que no hay que morirse, pero si uno se muere hay que hacerlo a tiempo y sonriendo. La sonrisa es indispensable. Los portadores de augurios fúnebres jamás saben sonreír. Yo les diría que aprendan, no el arte de morir, sino el arte de sonreír".
El cansancio se percibía en la voz del escritor, que dijo sentirse mejor de sus dolencias. "Pero no estoy aliviado, ni mucho menos. Es una enfermedad larga y perra". Por fortuna, añadió, Ios buenos amigos" la hacen más llevadera.
Paz explicó que sigue trabajando y que procura distraerse y ocuparse de aquellas cosas "profundas y secretas" que realmente valen la pena. "El arte de morir es el arte de jugar a las escondidillas", concluyó. "Hay que saber jugar este arte, que es un arte delicado, entre todos, y difícil".
Rivales
Nadie sabe de dónde salió el rumor, con el que Paz se une a la lista de famosos dados por muertos falsamente en los medios de comunicación, como el político colombiano López Michelsen o la actriz italiana Monica Vitti. La agencia francesa dijo haber recibido el aviso de un alto directivo del diario local La Jornada, que a su vez citó como fuente a "un organismo cultural mexicano". La versión habría sido confirmada por algunos intelectuales. Podría tratarse, pues, de las tristes consecuencias de la premura informativa que se impone en los medios, pero también, según lo apuntaba el propio. Paz, de algún deseo malsano nacido en ciertos círculos rivales.El precario estado de salud del poeta ha alimentado en más de una ocasión los rumores sobre su muerte, que quedaron apagados después de que concediera una entrevista el pasado agosto al escritor Guillermo Sheridan con motivo de la presentación de los dos vólumenes de su Obra Poética.
Los últimos meses han estado cargados de vicisitudes para Paz. En diciembre pasado, un incendio en el salón de su casa destruyó importantes obras de arte pero, sobre todo, buena parte de su gran biblioteca, lo que le causó un profundo desánimo. Poco después sufrió una intervención quirúrgica. Desde entonces trata de conservar la tranquilidad en casa de unos amigos.
