"Meras pantallas y testaferros"

¿Qué finalidad tenían las cuentas del Aresbank, el empleo de extranjeros y el envío a Singapur?, preguntó Luis Sala, abogado del Estado. "Ocultar el verdadero propietario de los fondos. Se utilizaron sociedades interpuestas que eran meras pantallas y administradores que eran meros testaferros. Pero las operaciones bancarias dejan huellas", contestó el perito.

Jack Pierre Aberlé y Jean Henry, los testaferros contratados presuntamente por Francisco Paesa, murieron en Ginebra hace un año en un periodo de seis meses. Ambos, en circunstancias extrañas. El primero apareció desnudo en la habitación de su hotel y el segundo en su domicilio con un disparo en la cabeza. En el Aresbank, que dirigía entonces Luis Vaño, trabajaba Beatriz García Paesa, sobrina del que fuera agente de Interior en la etapa socialista.

Entre otros puntos, los peritos aseguraron que no existe ningún indicio de que todos estos fondos no fueran propiedad exclusiva de Luis Roldán y su mujer y reiteraron que no hay ingresos procedentes de organismos públicos o personalidades ajenas a los procesados.