Portugal desembarca en Angola
Guterres abre una nueva etapa para impulsar el comercio con las ex colonias
ENVIADO ESPECIAL.El primer ministro portugués, Antonio Guterres, ha dirigido un auténtico desembarco de Portugal en Angola con el fin de recuperar el tiempo perdido en la ex colonia lusa, prácticamente abandonada por Lisboa desde su independencia en 1975, y aprovechar el previsible despegue económico de uno de los países más ricos de África. El socialista Antonio Guterres pretende "abrir" una nueva etapa que impulse el comercio y los intereses económicos en las ex colonias lusas más prósperas de África (Angola y Mozambique) y en Brasil.
Acompañado por cinco ministros, ocho secretarios de Estado y una delegación de 65 emprearios del más alto nivel, el primer ministro portugués concluyó ayer una visita de cuatro días a Angola que, a su juicio, "marcará un punto de inflexión de carácter histórico" en el futuro mercado luso. Con ese objetivo, Antonio Guterres subraya que Portugal ha invertido en Brasil "cerca de 1.000 millones de dólares en los dos últimos años" y quiere abrir "una nueva página de cooperación con Angola", un país de inmensos recursos naturales que produce 700.000 barriles diarios de petróleo (llegará al millón en el año 2000) y obtiene dos millones de dólares al día sólo con la venta de diamantes.
El primer ministro luso precisa que su objetivo no es "buscar en Angola gangas, oportunidades o negocios de ocasión, sino desarrollar un sistema de cooperación estratégica sin aprovecharnos de la corrupción".
Las delegaciones de Portugal y Angola suscribieron ayer más de una veintena de convenios económicos y comerciales, entre los que destacan un principio de acuerdo para renegociar la deuda angoleña a Lisboa (1,7 billones de dólares) y un protocolo que garantizará la protección recíproca de las inversiones. El jefe del Gobierno luso pretende reducir esa deuda con un futuro aumento de las entregas de petróleo.
Uno de los fundadores del Movimiento Popular para la Liberación de Angola (MPLA), Joaquim Pinto de Andrade, de 72 años, hoy día apartado de la política activa pero considerado como uno de los referentes morales de la sociedad civil, afirma que "Angola es un escándalo geológico; sus riquezas y sus potencialidades son inmensas e inagotables, pero como toda África está dominada por la corrupción. Para alcanzar la paz, se están dividiendo las riquezas de este país. El propio presidente Dos Santos y Savimbi se están repartiendo el pastel". Sus inmensas reservas de petróleo, los depósitos de todo tipo de minerales (desde diamantes hasta oro, hierro, cobre, cobalto o wolframio), su capacidad energética, sus grandes extensiones de tierra para cultivar o sus inagotables bancos de pesca han convertido a Angola en uno de los mercados prioritarios de África. A pesar de las dificultades que atraviesa el proceso de paz en Angola después de 20 años de guerra civil, el Gobierno luso confía en la futura estabilidad de su ex colonia, fundamentalmente por el decidido apoyo de la comunidad internacional y en concreto de Estados Unidos. Precisa mente, las multinacionales del petróleo norteamericanas (Chevron, Exxon o Texaco) se reparten y se disputan con las francesas (Elf Equitaine o To tal) la explotación del crudo en Angola. Y, significativamente, Coca-Cola decidió el pasado mes de septiembre instalar su primera fábrica en el país me diante una concesión por valor de 33 millones de dólares. La compañía francesa Elf descubrió el pasado verano los yacimientos de petróleo más ricos de la nación que, según los cálculos oficiales, elevarán la producción de petróleo en el año 2000 hasta el millón de barriles diarios.
El consejero económico y comercial de la embajada española en Luanda, Francisco Balaguer, explica que "si no estalla de nuevo la guerra, Angola conseguirá un despegue económico sin precedentes que podría multiplicar su renta per cápita en poquísimo tiempo". El presidente angoleño José Eduardo dos Santos, quien ha sabido librarse del lastre marxista y ganarse el apoyo de Estados Unidos, está convencido de tener prácticamente controlada a la antigua guerrilla de UNITA, lo que a su juicio evitaría un nuevo enfrentamiento armado.
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