Admitida a trámite una querella de Canal Satélite contra Asensio por estafa

María Paz Redondo, titular del juzgado 21 de Madrid, ha admitido a trámite una querella interpuesta por Canal Satélite y Gestport contra Antonio Asensio y dos de sus colaboradores, José Ramón Franco y Javier López López, a los que imputan dos delitos de estafa en la venta de derechos sobre el fútbol. Las empresas Gestora de Medios Audiovisuales (GMA) y GMAF, controladas por Asensio, transmitieron a Canal Satélite y a Audiovisual Sport unos derechos como si estuvieran libres de cargas, cuando estaban pignorados por Antena 3 en garantía de un préstamo de 12.500 millones de pesetas.

Los querellantes entienden que los querellados y las sociedades de Antonio Asensio (GMA y GMAF) les han causado graves perjuicios, por lo que solicitan que se les embarguen bienes por valor de 25.000 millones de pesetas. El artículo 251 del Código Penal castiga con prisión de uno a cuatro años al que disponga "de una cosa mueble o inmueble ocultando la existencia de cualquier carga sobre la misma". Los querellantes piden también la adopción de medidas cautelares personales contra los querellados.Antena 3 reveló el pasado 30 de septiembre la carga que pesaba sobre tales derechos, en respuesta a una consulta de Audiovisual Sport. Eso ha dado origen a la querella. La juez ha citado a declarar a Antonio Asensio el próximo 25 de noviembre, a José Ramón Franco, el 26, y a Javier López, el 28 del mismo mes. También ha sido citada, pero en calidad de testigo, la asesora jurídica de Antena 3.

Los hechos que dan motivo a esta querella se remontan al 7 de noviembre de 1996. La sociedad Gestora de Medios Audiovisuales (GMA), cuyo "dueño o propietario a través de terceros interpuestos" era Antonio Asensio -según los querellantes-, recibió un préstamo de 12.500 millones de pesetas; y en garantía del mismo, la cadena Antena 3, que entonces presidía Asensio, constituyó una prenda sobre los derechos de GMA.

Ese mismo día, en una notaría diferente a la utilizada para la operación anterior, el administrador único de GMA, Javier López, constituyó otra empresa, denominada Gestora de Medios Audiovisuales de Fútbol, S.L (GMAF), a la que fueron aportados los contratos de derechos audiovisuales que GMA había suscrito con los clubes. Esa aportación fue valorada en 20.000 millones de pesetas.

Pacto de Nochebuena

Como la explotación comercial de los derechos de fútbol resultaba muy difícil mientras permanecieran repartidos entre GMA, Televisió de Catalunya y Gestport -esta última, filial de Sogecable-, los tres llegaron al acuerdo del 24 de diciembre de 1996, más conocido como el "pacto de Nochebuena", por el que se comprometieron a explotar conjuntamente tales derechos.Todos ellos declararon entonces que no existía "carga ni reclamación alguna" sobre sus respectivos derechos, y que tampoco había "ninguna limitación contractual, judicial o de ninguna otra especie que pueda perturbar el funcionamiento de dicho sistema de explotación". En ningún momento se advirtió acerca de un derecho de prenda que gravara los derechos cedidos por GMAF.

En esas condiciones se produjo la cesión de GMAF a Canal Satélite Digítal de sus derechos televisivos para la modalidad de pago por visión, por los cuales Canal Satélite pagó 15.000 millones de pesetas.

Un mes más tarde, el 27 de enero de 1997, las tres sociedades mencionadas constituyeron Audiovisual Sport. Canal Satélite le cedió el usufructo de los derechos televisívos de "pago por visión" que había adquirido a GMAF. El resto de los derechos en poder de esta última (los de emisión de partidos en abierto y los de otras modalidades de pago) fueron aportados a Audiovisual Sport el 13 de marzo de 1997.

En ninguna de esas operaciones se hizo constar la existencia de prenda alguna sobre tales derechos. Los querellantes destacan que "se ha producido un desembolso de muchos miles de millones de pesetas en la creencía errónea de que los derechos adquiridos se hallaban libres de cargas y, en consecuencia, tenían un determinado valor, que no era tal".

Los querellantes entienden que se les ha causado un perjuicio evidente al haber abonado 6.366,6 millones de pesetas por la cesión de los derechos de retransmisión en el sistema de pago por visión. Además, Gestport se considera perjudicada porque su participación en Audiovisual Sport (40%) se valoró igual que la de GMAF (otro 40%) sobre la base de que esta última aportaba unos derechos para partidos en abierto y otras modalidades que, según se ha descubierto ahora, estaban gravados. De ese modo se incluyeron "fraudulentamente" en el activo de la sociedad unos bienes pignorados, lo cual ha colocado a Audiovisual Sport y a sus socios en una delicada situación frente a terceros.