Batalla campal contra la visita
Más de doscientas personas, entre ellas varios porteros y curiosos, fueron detenidas la noche del jueves durante los choques de la policía con grupos ultraizquierdistas y con gamberros que protestaban por la presencia en Argentina de Bill Clinton, reunido ayer con el empresariado para elogiar la apertura del país y las transformaciones económicas efectuadas por el presidente Carlos Menem. Los manifestantes transformaron la céntrica avenida de Santa Fe en un caos, destrozando a su paso varias sucursales bancarias, cajeros automáticos, escaparates y vehículos. La policía, que movilizó un millar de efectivos, cargó con porras y gases."Esas bandas tomaron Santa Fe sin que la policía apareciera cuando debía. Pudieron haber violado a una mujer en la misma calle, o haber asesinado a cualquiera", protestaba ayer el periodista de Radio Mitre Néstor Ibarra, cuyo programa recogió las airadas protestas de los vecinos contra la impunidad de los más violentos. La policía identificó a una parte de los detenidos como miltantes de los grupos extremistas Quebracho, Patria Libre y Partido Comunista Revolucionario. También fue confiscada gran cantidad de proyectiles y cócteles mólotov en poder de los revoltosos.
Los partidos de la izquierda radical argentina habían organizado una marcha, secundada por unas mil personas, hasta la Sociedad Rural Argentina (SRA), donde Menem debía homenajear a sus invitados, el presidente Bill Clinton y su esposa, Hillary, y los ministros de la comitiva norteamericana. Desfilaron pacíficamente por Santa Fe, pero al llegar a unos mil metros de la SRA toparon con un cordón policial.
Rápidamente se descolgaron dos grupos, medio centenar de personas encapuchadas en cada uno aproximadamente, que atacaron todo lo que pareciera norteamericano con pedruscos, garrotes y botellas incendiarias. El grueso de la manifestación, gritando contra Clinton y Menem, había desviado su marcha hacia otras calles tratando de alcanzar la Sociedad Rural, pero fue detenida por la policía quinientos metros antes, y quedó disuelta.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.