Nueve películas españolas se exhiben en el festival de los Hamptons

El festival de cine de los Hamptons, que el miércoles inauguró su quinta edición en una localidad costera cercana a Nueva York, dedica este año un ciclo especial a la productora Sogetel en el que se proyectarán seis películas de directores españoles. La cita anual en los Hamptons es, junto a la de Sundance, la más importante en el panorama independiente en Estados Unidos. Su director de programación, Stephen Gallagher, dice que estaba buscando una excusa para mostrar un grupo de películas españolas y que la encontró en Sogetel "porque parecía interesante mostrar cómo esa gran productora lleva a cabo coproducciones e intenta llevarlas ahora al plano internacional".Gallagher asegura que "las 10 películas que compiten en el festival están financiadas con tarjetas de crédito y préstamos bancarios". Los títulos que más suenan este año son Fakin da funk, Sparkler y River made to drown in.

En el homenaje a Sogetel se proyectarán durante este fin de semana El amor perjudica seriamente la salud, de Manuel Gómez Pereira; Amor propio, de Mario Camus; Más allá del jardín, de Pedro Olea; Mi hermano del alma, de Mariano Barroso; El tiempo de la felicidad, de Manuel Iborra; y Tranvía a la Malvarrosa, de José Luis García Sánchez. En otro programa se mostrarán los tres largometrajes de Julio Medem (Vacas, La ardilla roja y Tierra).

El festival se celebra en la lujosa localidad de East Hampton (en Long Island, Nueva York) y, a pesar de su enfoque independiente, en realidad surgió en 1992 por la iniciativa de una serie de nombres sobresalientes de la industria de Hollywood (Alec Baldwin, Sidney Lumet) e intelectuales (Gore Vidal) que veranean allí. Steven Spielberg es uno de los asesores del festival.

El director Manuel Gómez Pereira, que estos días busca financiación y actores en Estados Unidos para su ambicioso proyecto Remake, es el único cineasta español que se ha desplazado a East Haintpon para acudir al festival.