La especie inhumana
Los nazis, con un feroz racismo, mataron incontables personas de "razas inferiores" con la complicidad silenciosa, impersonal, del gas. Ahora, aún más cerca, otro exterminio indiscriminado de la población civil está pasando en silencio entre nosotros por un gas al que hacemos así económica, si no físicamente, cómplice de otro atroz genocidio. El de Argelia.Esta contaminación letal de intereses económicos y prejuicios racistas nos está transformando en una especie inhumana, sin sentimiento: e incluso irracional, incapaz de comprender lo que realmente le conviene a largo plazo. ¿Cuándo reaccionaremos, como hemos hecho ante tragedias de otros países, para frenar primero y resolver después hasta en sus raíces -incluso nuestras- esa marea sangrienta que, de lo contrario, acabará afectándonos tanto a nosotros mismos?-