La policía religiosa taliban detiene durante tres horas a la comisaria europea Emma Bonino

La política más mediática de la Unión Europea, Emma Bonino, reforzó ayer sus dotes de telegenia al convertirse en noticia de primera página en medio mundo. Fue detenida por un grupo de policías islámico talibán en Kabul, la capital de Afganistán. Junto a ella fueron detenidos también otros 18 miembros de la expedición europea, entre ellos ocho periodistas. Su pecado: fotografiar a las pacientes de un hospital de mujeres, infringiendo así las rígidas normas morales de los talibán. Todos ellos fueron puestos en libertad al cabo de tres horas v media.

La Comisión Europea aceptó las excusas del Gobierno afgano y aseguró que el incidente no afectará a la llegada de ayuda humanitaria a la población de ese país. Emma Bonino comprobó en carne propia el rango especial que ocupa la mujer en un país sometido a un Gobierno de integristas islámicos. Los 19 componentes de la expedición de ECHO, la oficina de ayuda humanitaria de la Comisión Europea, fueron detenidos y amenazados, Kaláshnikov en mano, por una patrulla de policías religiosos alertada de que los europeos estaban filmando y fotografiando a mujeres.

"Esto es un ejemplo de cómo la gente vive aquí día a día: en una situación de terror al buen tuntún", declaró Bonino a los periodistas que la acompañaban tras ser liberado todo el grupo. Además de Bonino y el equipo de ECHO, en la expedición viajaban tres periodistas británicos de la cadena norteamericana de televisión CNN, dos franceses de Canal Plus, dos italianos y un australiano.

La detención se produjo en la mañana de ayer, al intervenir una patrulla islámica que había sido alertada por uno de los trabajadores del hospital al ver que los europeos estaban filmando a las mujeres allí hospitalizadas. Según la patrulla, los europeos no tenían permiso para tomar fotografías. El viceministro de Sanidad afgano intentó en vano convencer a los guardias para que liberaran a Bonino y sus acompañantes. La liberación sólo se produjo cuando intervino el mulá Mohammed Rabbani, líder de los talibán.

La noticia de la detención causó cierta confusión en la sede de la Comisión Europea. El portavoz parecía estar más enterado de la situación por las informaciones que transmitía la cadena norteamericana CNN que por las noticias que le llegaban de la expedición europea. A mediodía, hora de Bruselas, cuando el grupo ya había sido liberado, Bonino aún no había hablado con el presidente de la Comisión, Jacques Santer. El portavoz aseguró que sí se había contactado con otros miembros de la expedición y que éstos le aseguraron que el Gobierno afgano se había excusado por la detención de la comisaria europea.

Bruselas intentó ayer restar importancia al incidente. Aseguró que la patrulla islámica desconocía la identidad de Bonino aunque, según la Comisión, el viaje estaba concertado con las autoridades del país y la comisaria había previsto entrevistarse con dos ministros talibán. En cualquier caso, la ayuda humanitaria a Afganistán continuará "porque esa ayuda se dirige directamente a la población a través de ONG y no pasa por vía gubernamental". Por la tarde, el presidente Santer hizo público un comunicado en el que deploraba el incidente, felicitaba a Emma Bonino "por su compromiso, incluso sufriendo riesgos personales, en favor de la acción humanitaria de la Comisión Europea, en Afganistán y en todo el mundo".

[Fuentes de los talibán aseguraron ayer que habían capturado el aeropuerto de Mazar i Sharif, controlado por las fuerzas opositorias, lo que les permite amenazar con el asedio a la ciudad, capital de la oposición. El aeropuerto, situado a unos ocho kilómetros al norte de la ciudad, habría sido tomado a primera hora de ayer].