"Los registros no fueron intimidatorios"

El fiscal Antonio Salinas, que no ha realizado ninguna pregunta a peritos ni a los testigos sobre la forma en que se realizaron los registros ordenados por el magistrado Marino Barbero, negó que éstos hubiesen sido intimidatorios, tal como han puesto de relieve al menos media docena de testigos de esas actuaciones en diferentes sedes. Para el fiscal, "no se desprende de los hechos que los registros fueran intimidatorios, ni que los peritos actuaran como han dicho los testigos". El acusador que representa a José María Ruiz Mateos, Marcos García Montes, señaló que Barbero se encontró con un procedimiento lleno de "mínas, obstáculos y complicaciones", que no ha sido fácil de estudiar y en el que ha habido "mucha ley del silencio y de echar el muerto a otro".García Montes repasó algunas de las frases más impactantes dichas durante el juicio, como la de que Navarro "era el jefe dé todos nosotros" o que alguno de los informes facturados por Filesa había costado dos millones de pesetas por página. El acusador también consideró sorprendente que no se archivasen los informes ni hubiese contratos escritos sobre- los mismos.El acusador del PP, Juan Ramón Montero Estévez, lamentó la "posición procesal" en que ha quedado tras anular el tribunal su acta de acusación y expresó su esperanza de que "las tres ramas" que sustentan el material probatorio -la denuncia de Van Schowen, el informe de los peritos y la actividad del juez instructor-, "no puedan ser quebradas como las defensas pretenden".