El PP achaca al sector más nacionalista de CiU las trabas a los guardias civiles que quieren ser mossos

El presidente del Partido Popular (PP) de Cataluña, Alberto Fernández Díaz, insistió ayer en su idea de que "la Generalitat debe reconsiderar su actitud" de establecer un cupo a los guardias civiles que desean ingresar en la nueva unidad de Tráfico de los Mossos d'Esquadra, la policía autonómica. Fernández Díaz opina que el gobierno catalán es "prisionero de los sectores más nacionalistas de CiU, que no quieren reconocer el arraigo y estima que hay en Cataluña hacia la Guardia Civil".Del total de 221 mossos que formarán la nueva unidad de Tráfico, que se desplegará en 1998 en Girona, se han reservado 33 plazas (el 15%) para los guardias civiles que ejercen sus tareas de control de carreteras y quieren pasarse a la policía catalana. Han pedido el cambio 71, mientras que para las 188 plazas restantes sólo hay 187 solicitudes de policías que ya pertenecen a los Mossos y tienen al menos dos años de antigüedad. El cupo del 15% lo pactó el Departamento de Gobernación de la Generalitat con la Dirección General de la Guardia Civil.

Estas declaraciones las ha hecho Fernández-Díaz al día siguiente de reunirse con una delegación de mujeres de guardias civiles, que tienen previsto entrevistarse con miembros de todos los grupos de la oposición para mostrar su desacuerdo con la decisición de la Generalitat de poner trabas a sus maridos.

Frente a la opinión del consejero de Gobernación, Xavier Pomés, que considera que la aceptación de un cupo mayor de miembros procedentes de una institución de carácter militar podría generar problemas organizativos en los Mossos, Fernández Díaz opino ayer que la incorporación de guardias civiles "no desnaturalizaría el modelo autonómico, sino que lo enriquecería", y apostó por una fórmula que permita a los agentes del instituto armado quedarse en Cataluña si lo desean, ya sea en los Mossos o en las policías municipales.

El concejal de Gobernación del ayuntamiento de Figueres, el socialista Martí Sans, ya se ha mostrado dispuesto a aceptar guardias civiles en la policía municipal de la ciudad.