El Instituto Monetario Europeo estudia reducir o eliminar el coeficiente de caja de la banca

El Instituto Monetario Europeo (IME) se encuentra en pleno debate sobre si mantener o no el coeficiente de caja que se aplica a bancos y cajas de ahorros. Este deberá ser uniforme en la Unión Europea con la moneda única. Las autoridades monetarias alemanas son partidarias de la flexibilización absoluta, en tanto que otras, entre ellas la española, no ven inconveniente en que se mantenga. En la actualidad, el coeficiente de caja en España es el 2% de los activos computables, lo cual suma unos 900.000 millones, que, además de estar inmovilizados, no tienen remuneración.

Una de las múltiples tareas del IME será la de determinar el coeficiente de caja (dinero que tienen inmovilizadas las entidades financieras como colchón de seguridad) que se ha de aplicar a los bancos y las cajas de ahorros con la llegada de la moneda única. Y deberá tener la resuelta, o al menos despejada, cuando el IME se transforme en el Banco Central Europeo, es decir, el 1 de enero de 1999.A un año vista, las posiciones de los distintos bancos centrales nacionales aún son meros esbozos, sujetos a modificación. Sin embargo, ya se va definiendo que el centro del debate será si el coeficiente desaparece. En principio, el poderoso Bundesbank, según señalan fuentes financieras, parece apoyar esta posibilidad.

Hay otro bloque de bancos centrales, entre ellos el español, que de entrada defienden una posición más prudente y aconsejan que se mantenga, aunque sea a un nivel más bajo que el que tienen algunos países. En la actualidad, el coeficiente de caja tiene distintos niveles y diferente remuneración en los países de la Unión Europea. Asimismo varia el periodo de cómputo (ver cuadro).

La actual legislación española establece el coeficiente de caja en del 2% de los pasivos computables. Se entienden por pasivos computables los depósitos de clientes y las cesiones temporales de activos que no sean públicos. En la actualidad, el volumen de depósitos que supone el coeficiente de caja de bancos y cajas es de 900.000 millones de pesetas, que no reciben ninguna retribución.

Medios bancarios han señalado que las, entidades españolas pueden salir beneficiadas por la futura modificación del coeficiente de caja, puesto queen ningún caso será superior al 2%.Eso supondrá liberar al menos , una parte de esos 900.000 millones de pesetas.

Además , la operativa para las entidades financieras será más sencilla.En la actualidad los bancos y cajas españolas hacen el cálculo de sus recursos de forma decenal. En el proyecto del futuro Banco Central Europeo se fijará un cómputo de cálculo mensual.

Los bancos centrales de los diferentes países de la Unión Europea también se han planteado establecer un coeficiente de caja para los fondos de inversión. Sin embargo, en este campo las posibilidades de que así ocurra son más bien remotas, ya que ni siquiera existe una legislación homogénea sobre este producto que en la economía española ha conocido un desarrollo espectacular.

Fondos de inversión

En el primer semestre de este año el patrimonio de los fondos de inversión ha crecido un 25,3%. Al finalizar el mes de junio el patrimonio de los fondos de inversión se situaba en los 23,4 billones de pesetas. El crecimiento de estos activos en el mercado español parece imparable y la rentabilidad media se ha situado en el 10,9% en los últimos 12 meses.El establecimiento de un coeficiente de caja para los fondos de inversión, además de su enorme complejidad, supondría tener que revisar las estadística de este producto en todos los países de la Unión Europea, ya que no se hallan homologadas. Tanto medios cercanos al banco emisor como expertos del mercado consideran muy poco probable que el futuro banco central europeo establezca este nuevo coeficiente.