Comedias y tortilla
La otra generación del 27 fue una introducción de José López Rubio en homenaje a sus compañeros de un teatro que arrancó con la República y vivió largamente con Franco. Lo dijo en su ingreso en la Real Academia, y en él englobó a todos: uno de ellos, Miguel Mihura, de quien era esta Carlota de 1955. Una parodia de la novela policiaca victoriana, o sea de Conan Doyle, de su Sherlock Holmes. Esta comedia es probablemente menos graciosa que hace cuarenta años, y su humor sobrepasado, pero el público la acogió con risas y aplausos.El truco policiaco es mínimo, aunque pudiera pasar por pieza de relojería; y un cartelón final, una banderola, pide a los espectadores que no lo cuenten para no quitar la ilusión a los futuros posibles espectadores. Es igual: se irá por otras razones. Carlota es la pieza fuerte del espectáculo llamado Crimen y castigo, o tiemble después de haber reído; en él hay otras piececillas, o pasos; y hay delante de las gradas unas mesas de taberna con tortilla y sangría y algunas otras cosas nocturnas y veraniegas -se debía dar la carta, con la misma solemnidad con que se da el reparto-; en resumen, un buen festejo popular, que no debe realmente confundirse con el teatro.
Crimen y Castigo, homenaje al humor de la generación del 27
Intérpretes: Luis Varela, María Kosty, África Gozalbes, Mara Goyanes. Dramaturgia: Alberto Miralles. Escenografía y dirección: David Bello. Los Veranos de la Villa. Muralla Arabe.