Pujol acuerda la salida inmediata y pactada de Alavedra del Gobierno de la Generalitat

, El relevo del actual consejero de Economía y Finanzas de la Generalitat catalana, Maciá Alavedra, tiene ya fecha establecida. Aunque la decisión sobre su marcha se tomó hace meses, Pujol y Alavedra acordaron en los primeros días de julio ejecutarla de inmediato y, en cualquier caso, antes de que comience la preparación de los presupuestos de la Generalitat de 1998, a primeros de septiembre. Algunas fuentes han señalado incluso que Alavedra podría anunciar su renuncia la próxima semana, antes del inicio de las vacaciones. Alavedra declinó ayer comentar el asunto.

En realidad, el acuerdo entre Pujol y Alavedra sobre el relevo de este último, siempre según las fuentes consultadas, arranca de hace casi un ano, después del verano de 1996, cuando ambos acordaron que la fecha límite sería este mes de julio. El propio Alavedra, según fuentes que conocen su opinión, ha afirmado que debería estar fuera del Gobierno antes de que éste comience los debates para los presupuestos de la Generalitat de 1998.Ese primer acuerdo de 1996 se produjo, de hecho, después de que Pujol diera marcha atrás a su decisión de sustituir a Alavedra en una reestructuración de su Gobierno que se produjo unos meses antes. En cualquier caso, Alavedra ha efectuado un discreto alejamiento de la actividad política del Gobierno de la Generalitat al tiempo que algunas competencias de su de: partamento, como la del control del gasto de la Administración catalana, se han desplazado en parte hacia el área de Presidencia, de la que es titular el consejero Xavier Trías.

Desde que, el año pasado, alcanzaron el acuerdo de formalizar la marcha de Alavedra para este verano, tanto Pujol como el propio consejero de Economía han sondeado la posibilidad de que su salida de la Generalitat coincidiera con su nombramiento como presidente de alguna empresa importante. Así, el propio Pujol planteó al ministro de Industria, Josep Piqué, la posibilidad de que Alavedra fuera nombrado presidente de la eléctrica pública ENDESA. El ministro, sin embargo, no apoyó esa propuesta. En la misma línea, se estudio la posibilidad de que presidiera alguna empresa privada, aunque con accionariado público, como es el caso de la eléctrica catalana Fecsa.

El último episodio relacionado con esta búsqueda de un nuevo cargo para Alavedra ha sido el relevo. al frente de Gas Natural, empresa participada por Repsol y La Caixa, entidad esta última que dispone de la prerrogativa de nombrar al presidente de la empresa.

Una vez puesta en marcha la operación de relevo del hasta ahora presidente de la empresa gasista, Pere Duran Farell, la Generalitat planteó al director general de La Caixa, Josep Vilarasau, la candidatura de Alavedra como sustituto. Pero también en este caso los planes de La Caixa implicaban el nombramiento de un hombre de la propia entidad, su director general adjunto Antoni Brufau, como nuevo presidente, lo que cerraba el paso al nombramiento de Alavedra. Precisamente ayer el consejo de Gas Natural nombró a Brufau nuevo presidente de la empresa pública.

En cuanto al posible sustituto de Alavedra en la cartera de Economía, fuentes próximas a la Generalitat se inclinaban ayer por el actual consejero de Industria, Comercio y Turismo, Antoni Subirá. En caso de que, como algunas fuentes apuntan, Alavedra acabara formalizando su marcha antes de las vacaciones de verano, Subirá asumiría interinamente las dos carteras y abandonaría la de Industria después de las vacaciones de agosto.

Al mismo tiempo, el consejero de Presidencia, Xavier Trias, actuaría de hombre puente. Esto es posible tanto por el hecho de que Trias ya conoce la elaboración de los presupuestos como por ser el gran especialista de la Administración catalana en la financiación de la sanidad.

Este tema constituye la principal fuente de roces políticos entre los gobiernos de Madrid y la Generalitat. Esta última reclama una mayor dotación presupuestaria para la sanidad y que el Gobierno asuma el importante déficit generado en esta área. Trias ha seguido directamente estas negociaciones, tanto en su época de consejero de Sanidad como cuando asumió la consejería de Presidencia de la Generalitat de Cataluña.