Cinco días en la gloria

La organización donostiarra viene mostrando un particular interés en encontrar los escenarios idóneos para cada manifestación jazzística y en equilibrar las ofertas lúdicas con las de contenido artístico más ambicioso. Entre tanta diversidad, este año destaca la banda reunida por Steve Coleman que pretende hermanar todas las músicas negras. Fiel a este principio, el saxofonista de Chicago ha puesto la mirada hacia Cuba y se lanza ahora a presentar en directo su demoledor disco The sign and the seal (transmisfions of the inetaphysics of a culture) junto a Afrocuba de Matanzas.Tito Puente y The Manhattan Transfer, los nombres de tirón popular por los que apuesta San Sebastián, llegan con proyectos mucho más consolidados. y previsibles. El veteranísimo rey , del timbal caribeño justifica su presencia en cualquier festival de jazz gracias a la intensa relación que mantuvo con esta música en los cincuenta.

Por su parte, el célebre grupo vocal tambien se ha convertido en visitante asiduo de eventos jazzísticos en su condición de practicante de un swing ligero, llano y poco dado. a las sorpresas- Ambas convocatorias, reúnen atractivos de sobra.

En oposición a las fórmulas seguras que han encumbrado a Puente y al cuarteto vocal, Steve Lacy lleva décadas sembrando de rigurosa inquietud artística la escena del jazz. La trayectoria del neoyorquíno cubierta fundamentalmente en Europa, ha sido tan pura, rica y honrada que extraña su éxito. Hoy está considerado el especialista supremo en la música de Thelonious Monk y todo un clásico irrenunciable, que apasiona cuando toca en solitario su saxo soprano y descubre sonoridades inéditas cada vez que se pone al frente de su grupo.

La espléndida acústica del salón de plenos del Ayuntamiento también realzará el pianismo denso y multicolor del panameño Danílo Pérez, ya una risueña realidad, y la camaradería de dos dúos que cubren la triste ausencia de Tete Montoliu, recientemente hospitalizado. Benny Green medirá su generosa técnica con la del rocoso contrabajista Ray Drummond, mientras Hank Jones (pianista de 79 años)- se unirá al formidable Nícholas Payton (trompetista de 23). El llamativo sentido del espectáculo del saxofonista Joshua Redinan y el prometedor encuentro de nuestro Jorge Pardo con la voz única de Jeanne Lee y el saxo alto dúctil de Gary Bartz, culminan un programa de cinco días de goce.