El Gobierno vasco repone unas esculturas de Ibarrola

El Gobierno vasco repondrá una decena de monolitos de Agustín Ibarrola que desaparecieron misteriosamente de sus emplazamientos originales. La Consejería de Transportes cumple así la reclamación del artista y pone fin al rocambolesco periplo de estas esculturas de metro y medio de altura y unos 50 centímetros de ancho fabricados en hormigón.El escultor vasco se enteró de la evaporación de las obras, encargadas por el Ejecutivo autónomo para convertirse en el sello de identidad de los puertos vascos, el año pasado, al recibir una carta de una estudiante que se percató cuando realizaba una tesis sobre el patrimonio público, según relató el pasado viernes un familiar de Ibarrola.

Por otro lado, una reliquia de san Valentín de Berriotxoa, patrón de Vizcaya y antepasado de Iñaki Urdangarin, prometido de la infanta Cristina, y del lehendakari José Antonio Ardanza, fue sustraida en la madrugada del viernes en la iglesia de La Encarnación de Bilbao. Los ladrones entraron por una de las vidrieras y tras descolgarse por una cuerda hasta el altar, reventaron la urna blindada que albergaba el cofre de plata que contenía la reliquia. Éste es el robo más importante de los tres que este mes ha sufrido el templo.