El Instituto Geominero pasa a depender de Medio Ambiente

La incorporación a la órbita del Ministerio de Medio Ambiente del Instituto Tecnológico Geominero de España, un organismo de investigación con vocación minera vinculado tradicionalmente a Industria, ya ha producido los primeros roces en su proceso de engranaje con la estructura de Medio Ambiente.Emilio Custodio, nuevo director del centro y experto en aguas subterráneas, ha preparado un borrador de estatutos que va más allá de lo esperado, ya que invade competencias de la Dirección General de Obras Hidráulicas, situada en su mismo nivel jerárquico, hecho que ha causado malestar en el entorno de su titular, Carlos Escartín, quien obtuvo la información por vía extraoficial.

El director del instituto ha empezado por bautizarlo de nuevo con el nombre de Instituto Geológico Medioambiental de España, organismo público de investigación adscrito a Medio Ambiente, a través de la Secretaría de Estado de Aguas y Costas, "sin perjuicio de su dependencia funcional de la Secretaría General de Medio Ambiente".

Si el hundimiento de la minería había mermado protagonismo al instituto, su nueva adscripción ministerial le ha colocado fuera de campo y sin reglas de juego. Custodio ha intentado marcarlas, pero "se ha pasado", según fuentes próximas a Obras Hidráulicas.

Con todo, el principal reproche es técnico, ya que adjudica a un organismo público de investigación funciones ejecutivas en la confección y desarrollo de actividades gestoras sobre aguas subterráneas, como la preservación del patrimonio geológico e hídrico o las técnicas de restauración de terrenos y acuíferos contaminados.